ESPECIAL. - El cóctel de anticuerpos desarrollado por la empresa de biotecnología estadounidense Regeneron, aplicado al presidente Donald Trump, para combatir la infección por COVID-19 se hace con células humanas derivadas de abortos.
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El cóctel de anticuerpos de Regeneron se prepara con las células conocidas como HEK-293T, obtenidas por primera vez en la década de los 70 de un riñón embrionario extraído luego de un aborto por elección realizado en los Países Bajos, indica el periódico The Guardian.
Las células HEK-293 son una de las líneas celulares más utilizadas en los laboratorios y de acuerdo con la investigación realizada por el citado medio “al menos cinco proyectos de vacuna contra COVID -19 utilizaron células HEK-293T o una línea de células obtenidas a partir de un aborto por elección de 1985 patentada por Laboratorios Janssen”.
En junio pasado el arzobispo de Valencia, España, Antonio Cañizares, fue blanco de burlas y críticas tras afirmar que algunas potenciales vacunas contra el COVID-19 estaban siendo fabricadas con células de seres humanos abortados.
Anteriormente, en abril, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (EU) pidió al gobierno de su país incentivar los proyectos de vacuna contra el COVID-19 que se desarrolladas sin el uso de tales células.
El uso en Donald Trump de un fármaco en el que se usan células humanas obtenidas de abortos ha generado polémica en EU debido a la fuerte convicción provida del presidente norteamericano y candidato presidencial del Partido Republicano.
Cabe mencionar que, el fármaco de Regeneron no está disponible para el público en general y hasta la fecha solo se ha probado en 275 personas, Donald Trump una de ellas.
El costo del cóctel de anticuerpos de Regeneron es de alrededor de 96 mil dólares, casi dos millones de pesos mexicanos al tipo de cambio actual.
Para consultar el artículo integro de The Guardian da click aquí.
ESPECIAL. - El cóctel de anticuerpos desarrollado por la empresa de biotecnología estadounidense Regeneron, aplicado al presidente Donald Trump, para combatir la infección por COVID-19 se hace con células humanas derivadas de abortos.
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El cóctel de anticuerpos de Regeneron se prepara con las células conocidas como HEK-293T, obtenidas por primera vez en la década de los 70 de un riñón embrionario extraído luego de un aborto por elección realizado en los Países Bajos, indica el periódico The Guardian.
Las células HEK-293 son una de las líneas celulares más utilizadas en los laboratorios y de acuerdo con la investigación realizada por el citado medio “al menos cinco proyectos de vacuna contra COVID -19 utilizaron células HEK-293T o una línea de células obtenidas a partir de un aborto por elección de 1985 patentada por Laboratorios Janssen”.
En junio pasado el arzobispo de Valencia, España, Antonio Cañizares, fue blanco de burlas y críticas tras afirmar que algunas potenciales vacunas contra el COVID-19 estaban siendo fabricadas con células de seres humanos abortados.
Anteriormente, en abril, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (EU) pidió al gobierno de su país incentivar los proyectos de vacuna contra el COVID-19 que se desarrolladas sin el uso de tales células.
El uso en Donald Trump de un fármaco en el que se usan células humanas obtenidas de abortos ha generado polémica en EU debido a la fuerte convicción provida del presidente norteamericano y candidato presidencial del Partido Republicano.
Cabe mencionar que, el fármaco de Regeneron no está disponible para el público en general y hasta la fecha solo se ha probado en 275 personas, Donald Trump una de ellas.
El costo del cóctel de anticuerpos de Regeneron es de alrededor de 96 mil dólares, casi dos millones de pesos mexicanos al tipo de cambio actual.
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ESPECIAL. - El cóctel de anticuerpos desarrollado por la empresa de biotecnología estadounidense Regeneron, aplicado al presidente Donald Trump, para combatir la infección por COVID-19 se hace con células humanas derivadas de abortos.
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El cóctel de anticuerpos de Regeneron se prepara con las células conocidas como HEK-293T, obtenidas por primera vez en la década de los 70 de un riñón embrionario extraído luego de un aborto por elección realizado en los Países Bajos, indica el periódico The Guardian.
Las células HEK-293 son una de las líneas celulares más utilizadas en los laboratorios y de acuerdo con la investigación realizada por el citado medio “al menos cinco proyectos de vacuna contra COVID -19 utilizaron células HEK-293T o una línea de células obtenidas a partir de un aborto por elección de 1985 patentada por Laboratorios Janssen”.
En junio pasado el arzobispo de Valencia, España, Antonio Cañizares, fue blanco de burlas y críticas tras afirmar que algunas potenciales vacunas contra el COVID-19 estaban siendo fabricadas con células de seres humanos abortados.
Anteriormente, en abril, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (EU) pidió al gobierno de su país incentivar los proyectos de vacuna contra el COVID-19 que se desarrolladas sin el uso de tales células.
El uso en Donald Trump de un fármaco en el que se usan células humanas obtenidas de abortos ha generado polémica en EU debido a la fuerte convicción provida del presidente norteamericano y candidato presidencial del Partido Republicano.
Cabe mencionar que, el fármaco de Regeneron no está disponible para el público en general y hasta la fecha solo se ha probado en 275 personas, Donald Trump una de ellas.
El costo del cóctel de anticuerpos de Regeneron es de alrededor de 96 mil dólares, casi dos millones de pesos mexicanos al tipo de cambio actual.
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