Eric Kilburn tiene 14 años y mide más de dos metros de altura, lo que hace problemático que encuentre zapatos a su medida, ya que incluso los tenis del talle 59 europeo (23 en Estados Unidos) le quedan chicos.
Este joven reside en Ortonville, ubicado en Michigan y debido a su gran altura, padece dolores de pies, callos y uñas enterradas, todo porque no encuentra zapatos que le calcen bien. Y como resultado, tuvieron que quitarle las uñas de sus dedos más grandes de forma permanente.
Sin embargo, esto no es todo lo que ha enfrentado Eric, porque según su familia, el joven se torció el tobillo en otoño mientras jugaba futbol, situación que pudo haberse evitado de usar las zapatillas deportivas adecuadas.
Rebeca, de 36 años y madre de Eric, pide que las marcas de calzado colaboren para hacer zapatos con tallas más grandes, dado que el tamaño promedio de los hombres estadounidenses es un 41.
"A los 14 todavía está creciendo. La mayoría de los niños tan grandes y altos a esta edad tienen un trastorno endocrino y él no. No posee problemas de salud con un crecimiento exponencial", afirmó Rebecca Kilburn a HometownLife.
La mujer agregó, que Eric se vio obligado a usar zapatos tipo crocs durante dos años, incluso en invierno, ya que no había otras opciones para él.
Eric también suele utilizar zapatos ortopédicos de mil 500 dólares, un aproximado de 9 mil 220 pesos, un gasto pesado para la familia y un diseño que suele avergonzar al adolescente. Sin embargo, no le quedan muchas opciones.
"Es frustrante como su madre y no poder encontrar zapatos, que es una necesidad tan básica. No puedo encontrar zapatos para mi hijo adolescente. ¿Qué puedo hacer cuando le crezcan los pies?", se pregunta la madre.
Según la mujer, un representante de una marca de tenis le dijo que la única forma en que la compañía podría fabricar zapatos para su hijo es si se convierte en atleta profesional.
Este casualmente es el sueño de Eric, ser jugador en la NFL, pero ¿cómo podría practicar sin tenis?, es lo que se pregunta constantemente esta mujer que sigue en búsqueda de una solución para su hijo.
MRG