Autoridades alertaron sobre la aparición de miles de peces muertos en las costas del Golfo de Texas, posiblemente arrastrados por la corriente hasta la arena.
Fue una pareja que estaba cerca de la playa de Quintana que observó los peces esparcidos por lo largo de la costa del Golfo de Texas, por lo que dieron aviso a las autoridades.
Algunos videos y fotografías se comenzaron a hacer virales en redes sociales, pues mostraban la gran cantidad de peces que había en las costas, y los responsables de la fauna salvaje describían como un episodio de bajo oxígeno disuelto.
Diferentes equipos de expertos de la región comenzaron a estudiar este hecho sobre las muertes de animales y fauna salvaje causadas por fenómenos naturales y por la contaminación.
“Las muertes de peces como ésta son frecuentes en verano, cuando aumentan las temperaturas”, dijo Johnson.Si no hay suficiente oxígeno en el agua, los peces no pueden ‘respirar'”, dijo el portavoz del equipo de Muertes y Derrames de la Región 3 de Parques y Vida Silvestre de Texas, Lerrin Johnson.
De acuerdo a Johnson, el bajo nivel de oxígeno disuelto, en muchos casos es un fenómeno natural.
Los responsables del parque del Condado de Quinta Beach, donde aparecieron los peces, opinaron que el agua más fría tiende a retener más oxígeno, y las aguas marinas más cálidas de Quintana podrían haber contribuido a la muerte de los peces menhaden.
La fotosíntesis impulsada por la luz solar provoca un aumento del oxígeno disuelto durante las horas diurnas, según Johnson, quien añadió que algunos peces también podrían estar en el fondo de la orilla del agua.
Finalmente, el mismo personal del Condado de Quintana Beach fue el encargado de comenzar a retirar a los peces de las orillas del mar, y advirtieron que los peces posiblemente no estarían tan limpios, por si algún visitante o turista quería llevarse uno.
MQ