La Unión Europea debe invertir más en ayudas en países en vías de desarrollo como parte de su plan para frenar la inmigración ilegal, defendió hoy la máxima diplomática del bloque, Federica Mogherini.
“Estamos pidiendo a los países miembros de la UE más dinero para el Fondo Fiduciario para África”, dijo al llegar para una reunión con los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintiocho, en Luxemburgo.
El mecanismo, creado con la intención de atajar los problemas que motivan miles de africanos a dejar sus países en busca de una vida mejor en Europa, “se ha mostrado útil y ha dado resultados”, sostiene Mogherini.
La diplomática recordó que la gestión de los flujos migratorios en el ámbito de la política exterior europea se ha basado en los últimos años en “asociaciones fuertes”, tanto con las Naciones Unidas (ONU) como con la Unión Africana y los países de origen y tránsito de migrantes.
“Es útil que los países miembros se den cuenta de que este trabajo en el lado externo necesita recursos adecuados para invertir en proyectos de desarrollo y también en asociaciones con países de origen y tránsito para gestionar los flujos migratorios de forma humana y sostenible al mismo tiempo”, abogó.