BEIRUT, 7 abr (Reuters) - Un grupo rebelde sirio acusó el sábado a las fuerzas del Gobierno de dejar caer una bomba de barril con sustancias venenosas sobre un enclave de civiles en Guta Oriental, mientras que una organización de ayuda humanitaria dijo que 35 personas perdieron la vida por ataques químicos en el área.
Medios estatales sirios negaron que las fuerzas del Gobierno hubieran lanzado un ataque químico poco después de que comenzaran a circular los reportes y dijeron que los rebeldes en la ciudad de Douma, en Guta Oriental, viven tal estado de desesperación que han empezado a propagar noticias falsas.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos dijo que 11 personas murieron en Douma tras sofocarse por el humo provocado por bombas convencionales lanzadas por el Gobierno. Indicó que un total de 70 personas presentaban dificultades para respirar.
Rami Abdulrahman, director del Observatorio, dijo que no podía confirmar que se hubieran usado armas químicas.
La organización de ayuda sanitaria Sociedad Médica Sirio Americana (SAMS) dijo que el hospital de Douma fue impactado por una bomba de cloro, lo que causó la muerte de seis personas, y que un segundo ataque con "una combinación de sustancias, incluyendo agentes neurotóxicos" alcanzó un edificio cercano.
Basel Termanini, vicepresidente de SAMS, una entidad con sede en Estados Unidos, dijo que un total de 35 personas habían perecido producto de ataques químicos. "Estamos contactando a Naciones Unidas, al Gobierno estadounidense y a gobiernos europeos", afirmó por teléfono.
Reuters no pudo verificar de inmediato los reportes. (Reportes de Dahlia Nehme y Mustafa Hashem. Editado en español por Marion Giraldo)