Estados Unidos.- Un matrimonio originario de Ohio, Estados Unidos, compararon un medicamento en la India y la mujer se lo tomó para interrumpir su embarazo, el cual ya estaba por los siete meses de gestación.
Pese a ello, el bebé nació vivo, sin embargo, el matrimonio no hizo nada para salvarlo y lo dejaron morir.
Kalina Gillum y Braden Mull fueron acusados ante la policía y ya enfrentan cargos por homicidio involuntario, manipulación de la evidencia y peligro para niños, por lo que fueron llevados ante un juez.
La mujer dio a luz en el baño de su domicilio y el abogado de la Fiscalía dijo que no llamaron al 911 para pedir auxilio para el bebé por lo que lo dejaron morir.