SEÚL, Corea del Sur (AP) — El misil estratégico de mediano alcance que probó Corea del Norte durante el fin de semana tiene capacidad para transportar una ojiva nuclear, informó el domingo su agencia oficial de noticias.
La propaganda norcoreana debe ser considerada con cautela, pero de ser confirmado, lo aseverado marca otro gran avance en el plan norcoreano de contar con un misil con ojiva nuclear capaz de llegar a la parte continental de Estados Unidos. Expertos externos no creen que Corea del Norte sea capaz aún de lograrlo, pero cada nueva prueba los acerca a ese objetivo.
El lanzamiento del domingo _en horario de Corea_ es un reto inmediato al nuevo líder surcoreano, un liberal que fue elegido apenas cinco días antes y quien ha expresado un deseo de acercamiento a Corea del Norte. El esfuerzo del país del norte de la península por impulsar su programa armamentista lo convierte además en una de las preocupaciones de política exterior más apremiantes del gobierno del presidente estadounidense Donald Trump.
Las fuerzas armadas de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos dijeron que misil voló durante media hora y alcanzó una altura inusualmente elevada antes de caer en el Mar de Japón. Tokio dijo que el patrón de vuelo podría indicar que se trató de un nuevo tipo de misil.
Funcionarios japoneses indicaron que el misil voló durante aproximadamente 30 minutos, viajó alrededor de 800 kilómetros (500 millas) y alcanzó una altitud de 2.000 kilómetros (1.240 millas).
La Agencia Central de Noticias de Corea señaló que el misil disparado el domingo fue un "nuevo cohete balístico estratégico de alcance medio tierra-tierra Hwasong-12 capaz de transportar una pesada ojiva nuclear de grandes dimensiones". Se dijo que el líder norcoreano Kim Jong Un observó la prueba y "abrazó a funcionarios en el campo de investigación de cohetes, y dijo que trabajaron duro para lograr algo grandioso", según la agencia estatal de noticias.
El lanzamiento pone en riesgo la voluntad del presidente surcoreano Moon Jae-in de conversar con Corea del Norte, y ocurrió en momentos en que navíos de guerra de Estados Unidos, Japón y Europa se reúnen para un ejercicio conjunto en el Océano Pacífico.
"El presidente expresó un profundo pesar por el hecho de esta imprudente provocación (...) ocurrida pocos días después de que se instituyó un nuevo gobierno en Corea del Sur", dijo el secretario presidencial Yoon Young-chan. "El presidente dijo que estamos dejando abierta la posibilidad de diálogo con Corea del Norte, pero debemos tratar severamente una provocación para evitar que Corea del Norte haga una estimación errónea".