Al menos diez personas fallecieron en medio de un tiroteo que se registró al interior de un supermercado en Buffalo, Nueva York. La policía local detuvo al joven de 18 años responsable de la agresión contra los clientes de una tienda de la cadena Tops, que se encuentra en Jefferson Avenue.
Por su parte, el departamento de policía de Buffalo no ha confirmado la información de las víctimas, así como tampoco ha detallado la cantidad de muertos o lesionados durante el ataque. Por lo que se ha limitado a manifestar que varias personas fueron alcanzadas por los disparos.
Se encontraron cinco cuerpos sin vida en el área de estacionamiento de automóviles. Una fuente policial aseguró que el sujeto armado con un rifle portaba también una cámara y una armadura corporal con un casco militar. Hasta el momento, se están realizando investigaciones que determinen si el joven estaba transmitiendo en vivo el ataque.
Uno de los testigos confirmó que contó con el tiempo necesario para ocultarse detrás de una de las neveras del establecimiento cuando el tiroteo dio inicio. Este sujeto identificado como Will G, narra que escuchó los disparos que sonaban como si varios objetos pesados estuvieran cayendo de los estantes.
De acuerdo a otro testigo, el hombre que comenzó el tiroteo se encontraba muy bien armado, con vestimenta militar y chaleco antibalas, además de que se trataba de una persona joven, de aparentemente 20 años.
La tienda se encuentra adentro de un vecindario de clase baja, en Buffalo, y de acuerdo a medios locales, se trata de un supermercado popular en una zona en la que radica gente con descendencia afroamericana, por lo que se menciona que este tiroteo fue también un acto de motivación racial.
El ataque del tiroteo está siendo investigado como un crimen de odio, de acuerdo a Stephen Belongia, agente especial de la oficina del FBI en Buffalo, quien también afirma que es un caso de violencia extremista de motivación racial.
AA