El papa Francisco será operado de emergencia este 7 de junio por un riesgo de obstrucción intestinal, informó el Vaticano.
Matteo Bruni, director del servicio de prensa del Vaticano, explicó que el pontífice de 86 años será intervenido de manera necesaria por la agravación de sus síntomas y requerirá de varios días de hospitalización.
El papa fue llevado al hospital Gemilli, al noroeste de la capital italiana, donde primero tendrá una laparotomía y después una cirugía plástica de la pared abdominal.
"Al comienzo de la tarde, se someterá a una operación quirúrgica de laparotomía y de cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis, bajo anestesia general", explicó Bruni en un comunicado.
¿Qué es una laparotomía?
La laparotomía es una intervención que consistente en abrir el abdomen. La operación, preparada estos últimos días por el equipo médico que asiste al Santo Padre, se ha vuelto necesaria a causa de “una hernia incisional que provoca síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y en vías de agravación", según Matteo Bruni.
Debido a esta operación, el papa tendrá que permanecer en el piso 10 del hospital Gemilli, en la misma habitación utilizada por el papa Juan Pablo II, operado en varias ocasiones en ese centro médico.
¿Qué otros padecimientos tiene el papa?
El papa Francisco también padece dolores crónicos de rodilla, que lo obligan a desplazarse en silla de ruedas o con ayuda de un bastón. Además, a consecuencia de estos dolores, el pontífice tuvo que anular sus citas previstas el 26 de mayo por un estado fiebroso, mismo que no requirió ingreso hospitalario.
La salud del santo padre ha alimentado regularmente las especulaciones sobre una posible renuncia. En varias ocasiones dijo que se plantearía dimitir -como hizo su predecesor Benedicto XVI, fallecido el 31 de diciembre- si su salud así lo obligara, pero recientemente dijo que tal escenario no era de actualidad.
MRG