Santiago, 13 Oct .- El comité permanente de la Conferencia Episcopal de Chile expresó en un comunicado: “nuestra palabra es de cercanía hacia quienes han sufrido el abuso y daño causado por obispos”. Este sábado, el Vaticano anunció la decisión del Papa Francisco de remover a otros dos religiosos chilenos del estado clerical: el arzobispo emérito de La Serena, Francisco José Cox, y el obispo emérito de Iquique, Marco Antonio Órdenes.
La Iglesia católica chilena sostuvo que “los obispos de la Conferencia Episcopal continuamos nuestro caminar de renovación eclesial, con nuestro servicio a disposición del discernimiento del Santo Padre, y trabajando con afán”.
El comunicado fue firmado por el presidente de la conferencia chilena, Santiago Silva, el secretario general, Fernando Ramos, y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
Estas expulsiones se suman a la de Francisco Karadima, en septiembre pasado, también por casos de abuso sexual dentro de la Iglesia católica.