ESTADOS UNIDOS.- Una foto tomada en 1984 y que apareció en un anuario escolar de una persona con el rostro pintado de negro y otra con una túnica del Ku Klux Klan dio un giro a la carrera del gobernador de Virginia, Ralph Northam, que dejó al descubierto el comportamiento racista en la cultura, las instituciones y la política de Estados Unidos.
TE RECOMENDAMOS: Francia, España y Suecia reconocen a Guaidó en día de la conmemoración del 4F
Día atrás, Northam de 59 años, rechazó los llamados a renunciar, de parte de muchos estadunidenses de ascendencia africana, quienes aseguran que Northam demostró un cierto sentido de privilegio entre los blancos, en los que pusieron de manifiesto la necesidad de que ésta nación aborde la cuestión de la raza de una vez por todas.
Para el director general interino de la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP, por sus siglas en inglés), Derrick Johnson, el hecho de tener al presidente Donald Trump en la Casa Blanca, quien ha creado un escenario político de intolerancia y odio racial, ha sacado a la luz una herida de hace tiempo”.
Una foto de tiempos de estudiante universitario de Northam ha sido blanco de críticas, luego que medios de prensa del estado lo publicaran. Tanto republicanos como demócratas lo acusan de racista y le exigen su renuncia. En un inicio el gobernador aceptó que aparecía en la foto y se disculpó por ella, pero ahora lo niega y se rehúsa a dejar el cargo.
Sin embargo, el grupo Virginia Legislative Black Caucus, que agrupa a afroamericanos elegidos para la legislatura del estado, describió las imágenes como "repugnantes, reprensibles y ofensivas", informó el Nuevo Herald .
El ex vicepresidente estadunidense, Joe Biden, citó en un tuit que Northam debía deponer su cargo. "No hay lugar para el racismo en Estados Unidos. El gobernador ha perdido toda autoridad moral y debe renunciar de inmediato".
Demandas similares también fueron expresadas por cuatro candidatos demócratas a la presidencia: los senadores Kirsten Gillibrand, Kamala Harris y Cory Booker, y el alcalde de Texas, Julian Castro.
La foto también provocó una rápida reacción por parte de los conservadores, incluido Jack Wilson, presidente del Partido Republicano de Virginia, quien también llamó a Northam a renunciar.
La senadora demócrata Elizabeth Warren, quien está considerando su candidatura presidencial en 2020, también pidió la renuncia del político.
"Estas imágenes racistas son profundamente perturbadoras. El odio y la discriminación no tienen lugar en nuestro país y no deben tolerarse, especialmente por parte de nuestros líderes, ya sean republicanos o demócratas".
JM