Los Ángeles
La Policía de la ciudad de Seattle (Washington, noroeste de EU), se encuentra en el centro de una polémica después de disparar a una mujer de raza negra embarazada, armada con un cuchillo, que había llamado para reportar un robo.
Los dos agentes que acudieron "se enfrentaron a una mujer de 30 años de edad, armada con un cuchillo. Los dos policías dispararon, hiriendo a la mujer", informó la policía en un comunicado emitido pocas horas después del incidente.
Cuando los bomberos llegaron poco después, declararon el deceso de la joven, según la Policía, que apunta que "varios niños estaban en el departamento en el momento de los disparos, pero no resultaron heridos".
De acuerdo con miembros de la familia, citados por la prensa local, la mujer identificada por los medios como Charleena Lyles era madre de tres niños, estaba embarazada de tres meses, y sufría de problemas mentales.
Se inició una investigación para analizar el uso de la fuerza por parte de los dos agentes, bajo licencia administrativa mientras dure la investigación, dijo la policía de Seattle.