ESPECIAL. – El “Caso Linden Cameron” ha conmocionado a la opinión pública en Estados Unidos (EU), se trata de un niño de 13 años con síndrome de Asperger al que un policía le disparó 11 veces cuando el pequeño sufría una crisis.
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Los hechos, ocurridos a inicios de septiembre, se dieron en el estado de Utah donde la madre de Linden Cameron, la señora Golda Barton, solicitó la ayuda al 911 para controlar a su hijo quien se encontraba gritando sin poder controlarse al interior de su domicilio debido a la crisis que estaba pasando.
Golda Barton afirmó que en su llamada al 911 aclaró que su hijo era menor de edad, no se encontraba armado y estaba padeciendo una crisis luego de enterarse que ella regresaría a trabajar tras más de un año de no hacerlo y pasar todo el tiempo conviviendo con el menor.
Agregó que cuando llegaron los oficiales a su domicilio les pidió no mostrar su placa al niño; pues este les tenía miedo a los policías debido a que su padre murió en un enfrentamiento policíaco.
Sin embargo, acusó, el oficial Keith Horrocks no le dio importancia a la recomendación y al entrar a la casa sorprendió al menor de edad el cual salió corriendo de la propiedad mientras el uniformado le gritaba que parara y se tirara al suelo.
Debido a que el niño no hizo caso a la recomendación, y no haberse cerciorado por si mismo que el menor de edad no estab armado, el oficial disparó en 11 ocasiones contra Linden Cameron.
Linden Cameron logró sobrevivir al ataque y se encuentra internado con lesiones en los tobillos, el hombro y sus intestinos; mientras que la madre exige castigo para el oficial.
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Con información de Cultura Colectiva News.
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