BRASILIA. — Los incendios en la Amazonía brasileña aumentaron 28 por ciento en julio respecto de hace un año, informó una agencia estatal el sábado.
El Instituto Nacional de Investigación Espacial, que monitorea a Brasil, indicó haber registrado el mes pasado 6 mil 803 incendios en la selva tropical de la Amazonía, en comparación con los 5 mil 318 del mismo mes de 2019.
Ambientalistas manifestaron preocupación por el incremento ya que agosto marca habitualmente el inicio de la temporada de incendios en la región. Temen que Brasil pueda tener de nuevo un incremento en los incendios como sucedió en agosto pasado, cuando el instituto contabilizó 30 mil 900.
El fuerte incremento en los incendios ocurre en medio de la preocupación nacional e internacional frente a los llamados del presidente Jair Bolsonaro a desmontar tierras en la Amazonía brasileña para impulsar el desarrollo económico.
En atención a esas preocupaciones, el gobierno prohibió el 16 de julio por cuatro meses las quemas en el humedal conocido como el Pantanal. Bolsonaro también emitió en mayo una orden para que las fuerzas militares coordinen las acciones ambientales en la Amazonía.
Sin embargo, expertos dijeron que las cifras indican que la respuesta del gobierno no está siendo eficaz y señalaron la posibilidad de que la temporada de sequía de este año sea incluso más propensa a los incendios que el año pasado.
Carlos Nobre, investigador del Instituto de Estudios Avanzados en la Universidad Estatal de Sao Paulo, aseveró que el índice de deforestación también ha permanecido alto este año hasta julio, en comparación con los últimos dos años.
“Podemos concluir, con datos compilados hasta finales de julio, que ha sido baja la efectividad de las acciones del gobierno para disminuir los incendios y la deforestación”, subrayó.
Por su parte, Carlos Rittl, alto miembro del Instituto para estudios Avanzados de Sostenibilidad en Alemania, dijo a The Associated Press que las tendencias en la Amazonía son preocupantes.
“La tendencia es que este será un año más seco que 2019, lo cual facilita la propagación del fuego”, apuntó.
cog
BRASILIA. — Los incendios en la Amazonía brasileña aumentaron 28 por ciento en julio respecto de hace un año, informó una agencia estatal el sábado.
El Instituto Nacional de Investigación Espacial, que monitorea a Brasil, indicó haber registrado el mes pasado 6 mil 803 incendios en la selva tropical de la Amazonía, en comparación con los 5 mil 318 del mismo mes de 2019.
Ambientalistas manifestaron preocupación por el incremento ya que agosto marca habitualmente el inicio de la temporada de incendios en la región. Temen que Brasil pueda tener de nuevo un incremento en los incendios como sucedió en agosto pasado, cuando el instituto contabilizó 30 mil 900.
El fuerte incremento en los incendios ocurre en medio de la preocupación nacional e internacional frente a los llamados del presidente Jair Bolsonaro a desmontar tierras en la Amazonía brasileña para impulsar el desarrollo económico.
En atención a esas preocupaciones, el gobierno prohibió el 16 de julio por cuatro meses las quemas en el humedal conocido como el Pantanal. Bolsonaro también emitió en mayo una orden para que las fuerzas militares coordinen las acciones ambientales en la Amazonía.
Sin embargo, expertos dijeron que las cifras indican que la respuesta del gobierno no está siendo eficaz y señalaron la posibilidad de que la temporada de sequía de este año sea incluso más propensa a los incendios que el año pasado.
Carlos Nobre, investigador del Instituto de Estudios Avanzados en la Universidad Estatal de Sao Paulo, aseveró que el índice de deforestación también ha permanecido alto este año hasta julio, en comparación con los últimos dos años.
“Podemos concluir, con datos compilados hasta finales de julio, que ha sido baja la efectividad de las acciones del gobierno para disminuir los incendios y la deforestación”, subrayó.
Por su parte, Carlos Rittl, alto miembro del Instituto para estudios Avanzados de Sostenibilidad en Alemania, dijo a The Associated Press que las tendencias en la Amazonía son preocupantes.
“La tendencia es que este será un año más seco que 2019, lo cual facilita la propagación del fuego”, apuntó.
cog