El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, afirmó durante una entrevista con el canal alemán Deutsche Welle que no retornará al diálogo nacional, mediado por la Iglesia católica, porque “no funcionó”.
“Se hizo un intento y sencillamente no funcionó, primero, porque era televisado”, señaló el mandatario a ese canal en Managua.
Además agregó que están “trabajando directamente desde la base, que es lo más importante”, refiriéndose a la población de las comunidades y de los barrios.
El diálogo, que permanece suspendido desde el 25 de junio, se instaló a mediados de mayo pasado, sin embargo ,su desarrollo ha sido intermitente.Ortega ha calificado a los obispos, quienes fungen como mediadores, de “golpistas” y cómplices de las fuerzas que, a su juicio, actúan en Nicaragua para derrocarlo.
Pese a esta declaraciones, el mandatario nicaragüense aseguró que está dispuesto a “conversar” con su par de Estados Unidos, Donald Trump, pues lo considera un movimiento “necesario e imprescindible” para hacer frente a la crisis, aunque también denunció el riesgo de una “intervención militar” por parte de Washington, al que acusó de estar detrás de las manifestaciones en su contra.
Al respecto, la alta comisionada de la ONU, Michelle Bachelet, pidió reforzar la vigilancia en el país. Nicaragua vive desde el 18 de abril una crisis política que ha generado 400 muertos.