Durante una manifestación contra el presidente de Perú, Pedro Castillo, en Lima, cuatro policías terminaron heridos tras los destrozos en el Palacio de Justicia y la sede nacional de la fiscalía, de acuerdo al gobierno peruano.
Alfonso Chávarry, ministro del interior, mencionó que le fue informado que los heridos fueron atendidos inicialmente por los bomberos. Además de que confirmó que los actos de vandalismo son los que están atacando directamente a la policía.
Este incidente se suscitó mientras Castillo se encontraba en un diálogo con los líderes opositores que controlan al Congreso, por lo que cientos de personas estaban protestando en los alrededores del edificio legislativo y otros puntos de Lima.
Durante esta reunión, el presidente peruano informó que el toque de queda diurno que había decretado para este 5 de abril había finalizado, con la intención de contener protestas por el alza de precios de los combustibles y alimentos.
Algunos manifestantes chocaron contra los policías cerca del Congreso, mientras un grupo de ellos accedió violentamente al Palacio de Justicia, que se encuentra cerca, donde provocaron destrucciones y robaron computadoras, así como otros equipos, de acuerdo a la policía.
Los protestantes también rompieron algunas ventanas de la fiscalía, que se encuentra también en la zona central de Lima. La policía intentó evitar que los manifestantes violentos se acercaran, en conjunto con agentes montados, sin embargo, los caballos fueron atacados con piedras.
El fin del toque de queda fue recibido con porras por los cientos de manifestantes reunidos alrededor del Congreso y en otros lugares de la capital de Perú, por sentir que le habían doblado la mano a Castillo.
Los comercios estaban cerrados, así como las clases fueron suspendidas y el transporte público estaba casi ausente en Lima. Los limeños se mostraron asombrados por la medida anunciada durante la medianoche del 4 de abril por Castillo, ya que las revueltas habían sido las más graves que ocurrieron en provincias, y no en la capital.
AA