MEDAN.- Reclusos descontentos prendieron fuego en una abarrotada prisión en la isla indonesia de Sumatra durante un motín el miércoles, dijeron funcionarios.
Las autoridades movilizaron a cientos de policías y soldados para retomar el control del penal de Kabanjahe, en la provincia de Sumatra Norte, que está diseñado para acoger a 193 presos, aunque en la actualizad da cabida a más de 400, señaló Sri Puguh Budi Utami, directora general de prisiones en el Ministerio de Justicio y Derechos Humanos. La cárcel estaba custodiada por apenas ocho agentes, dijo.
La causa del motín no estuvo clara de inmediato y estaba siendo investigada, apuntó Utami. Una pesquisa preliminar señaló que se inició luego de que los reos protestaron por el trato dado por los guardas a cuatro presos que fueron colocados en aislamiento tras ser descubiertos con droga en sus celdas, agregó.
Otros reclusos, en su mayoría arrestados por delitos de narcotráfico, se unieron a una protesta que se volvió violenta, aunque no se reportaron decesos, añadió Utami.
Videos de televisión mostraron a presos en un campo al aire libre custodiados por soldados, mientras policías sacaban a otros del complejo. Una columna de humo negro salía de un edificio y en la zona había material de oficina y documentos calcinados esparcidos.
Ocho camiones de bomberos participaron en las labores de extinción del incendio y alrededor de 500 policías y soldados protegían el perímetro para evitar fugas de presos, dijo el jefe de la policía local, Benny Hutajulu.
Las fugas y los motines son habituales en Indonesia, donde la sobrepoblación se ha convertido en un problema en prisiones que, con bajos presupuestos, acogen a un gran número de personas detenidas por tráfico de drogas.
dezr
MEDAN.- Reclusos descontentos prendieron fuego en una abarrotada prisión en la isla indonesia de Sumatra durante un motín el miércoles, dijeron funcionarios.
Las autoridades movilizaron a cientos de policías y soldados para retomar el control del penal de Kabanjahe, en la provincia de Sumatra Norte, que está diseñado para acoger a 193 presos, aunque en la actualizad da cabida a más de 400, señaló Sri Puguh Budi Utami, directora general de prisiones en el Ministerio de Justicio y Derechos Humanos. La cárcel estaba custodiada por apenas ocho agentes, dijo.
La causa del motín no estuvo clara de inmediato y estaba siendo investigada, apuntó Utami. Una pesquisa preliminar señaló que se inició luego de que los reos protestaron por el trato dado por los guardas a cuatro presos que fueron colocados en aislamiento tras ser descubiertos con droga en sus celdas, agregó.
Otros reclusos, en su mayoría arrestados por delitos de narcotráfico, se unieron a una protesta que se volvió violenta, aunque no se reportaron decesos, añadió Utami.
Videos de televisión mostraron a presos en un campo al aire libre custodiados por soldados, mientras policías sacaban a otros del complejo. Una columna de humo negro salía de un edificio y en la zona había material de oficina y documentos calcinados esparcidos.
Ocho camiones de bomberos participaron en las labores de extinción del incendio y alrededor de 500 policías y soldados protegían el perímetro para evitar fugas de presos, dijo el jefe de la policía local, Benny Hutajulu.
Las fugas y los motines son habituales en Indonesia, donde la sobrepoblación se ha convertido en un problema en prisiones que, con bajos presupuestos, acogen a un gran número de personas detenidas por tráfico de drogas.
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