Bagdad.- El Estado Islámico (EI) destruyó el miércoles pasado la antigua mezquita de Al Nuri, en Mosul, ante el avance de las fuerzas iraquíes. El edificio del siglo XII, conocido también como la Gran Mezquita, lleva el nombre de Nour al Din Zanki, el musulmán sunita que ordenó su construcción. Además de su importancia histórica, también fue el lugar en el que el líder del EI, Abu Bakr al Baghdadi, proclamó en 2014 su califato en Irak y Siria.
El primer ministro iraquí, Haider al Abadi, aseguró que la destrucción de la histórica mezquita implica que el grupo terrorista admite su derrota: “La detonación del EI del minarete de Al Hadba y la mezquita de Al Nuri es una declaración formal de derrota”, escribió en Twitter.
La directora de la Unesco, Irina Bokova, expresó ayer su consternación por la devastación de la mezquita y su minarete: “Esta nueva destrucción agrava las heridas de una sociedad de por sí afectada por una tragedia humana sin precedentes”, declaró en un comunicado.