La Fundación Nobel retiró este 2 de septiembre su invitación a representantes de Rusia, Bielorrusia e Irán para acudir a las ceremonias de entrega de los premios Nobel debido a que la polémica decisión “causó fuertes reacciones”.
Diversos legisladores de Suecia dijeron el 1 de septiembre que boicotearían las ceremonias en Estocolmo cuando la fundación privada que administra los preciados galardones invitó a Rusia, Bielorrusia e Irán, que antes estaban vedados.
Algunos de los legisladores mencionaron como razones de su actitud la guerra de Rusia en Ucrania y los ataques a los derechos humanos en Irán.
La dirigente opositora bielorrusa Sviatlana Tsikhanouskaya elogió la decisión de la Fundación Nobel y dijo a la AP que la consideraba una clara señal de solidaridad con los pueblos bielorruso y ucraniano.
“Así es como uno demuestra su adhesión a los principios y valores de Nobel”, mencionó Tsikhanouskaya.
El vocero del ministerio del Exterior ucraniano Oleh Nikolenko calificó la decisión de “victoria para el humanismo”.
“Gracias a todos los que exigieron que se restaure la justicia”, escribió Oleh en Facebook y agregó que también se debería tomar una decisión parecida acerca de la asistencia de los embajadores ruso y bielorruso a los festejos en Noruega después de la ceremonia en Suecia.
El primer ministro Ulf Kristersson, mencionó el 1 de septiembre a la prensa local, que si de él dependiera, no permitiría la asistencia a Rusia.
La Fundación Nobel dijo a través de una breve declaración que “la base de la decisión (de invitar a los tres países) es transmitir lo más ampliamente posible los valores y mensajes que representa el Premio Nobel”.
Además agregó que ante “las fuertes reacciones en Suecia, que eclipsaron totalmente este mensaje”, decidió no invitar a “los embajadores de Rusia, Bielorrusia e Irán a la ceremonia del Premio Nobel en Estocolmo”.
No obstante, dijo que se atendría a la práctica común de invitar a todos los embajadores a la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz en Oslo, Noruega.
AA