HARRISBURG.- Las autoridades de Pensilvania emitirán un reporte sobre cómo las agencias de bienestar infantil pudieron dejar que una joven soportara abusos durante años antes de ser violada y asesinada en el 2016.
Sara Packer se declaró culpable de asesinato premeditado y el viernes fue sentenciada a cadena perpetua sin libertad condicional por tramar la muerte de su hija adoptiva Grace Packer, de 14 años.
El novio de la acusada, Jacob Sullivan, quien violó y estranguló a Grace, fue sentenciado a muerte la semana pasada.
La joven fue abusada mental, física y sexualmente durante años antes de ser asesinada, pero las agencias de bienestar infantil permitieron que viviera con Sara Packer.
El departamento de servicios sociales del estado investigó la muerte de Grace. Las conclusiones permanecieron bajo secreto mientras cursaba el juicio contra Packer y Sullivan. Debido a que el proceso judicial ha concluido, las autoridades emitirán sus hallazgos el lunes.
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