Manila.- Una serie de fuertes sismos sacudieron este sábado la provincia de Batanes, en el norte de Filipinas, dejando al menos ocho personas muertas, incluido un bebé de 10 meses, y más de 100 heridas, reportaron medios locales.
Desde las 04:16 horas, Batanes ha sido sacudida por casi una docena de sismos, el más intenso de los cuales alcanzó la magnitud 5.9, según el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs).
El segundo terremoto, que inicialmente se informó que fue de una magnitud de 6.4 y luego se redujo a 5.9, causó daños a viviendas y otros edificios.
Las imágenes en los medios de comunicación filipinos mostraron casas derrumbadas, carreteras agrietadas y una iglesia dañada.
El alcalde de Itbayat, Raul De Sagon, dijo a la emisora DZMM que la mayoría de las víctimas "fueron enterradas por los escombros de sus viviendas, porque habitaban casas antiguas hechas de piedras calizas, sin refuerzo de metal".
Los heridos, que suman más de 100, serán evacuados al Hospital General de Basco, informó el gobernador de Batanes, Marilou Cayco, citó el sitio Daily Tribune.
Los militares enviaron equipos de rescate y recuperación a Batanes, incluidos equipos médicos a bordo de un avión C-295 que aterrizó en el aeropuerto de Itbayat poco antes del mediodía.
Se esperan más réplicas, pero no hay amenazas de tsunami, informó la oficina de sismología de Filipinas, de acuerdo con el portal Philstar.