MÉXICO.- La mayoría de los 33 migrantes que naufragaron en la costa de Point Loma en San Diego, California, Estados Unidos, de los cuales murieron al menos cuatro, son de origen mexicano, informó el Consulado de México en Tijuana, Baja California.
Autoridades informaron que ya lograron entrevistar a parte de los sobrevivientes y la mayoría son de nacionalidad mexicana. Los afectados reciben la asistencia médica necesaria y solo una persona se reporta en estado de gravedad de salud.
De los 33 migrantes que viajaban en el navío, 25 son hombres y 8 son mujeres, de entre 18 y 40 años de edad. Se indicó que conforme el estado de salud de las personas afectadas se estabilice, serán puestos a disposición de las autoridades migratorias.
En cuanto a las personas fallecidas, el consulado general se encuentra en comunicación con la Oficina del Médico Forense para dar seguimiento al proceso de identificación de los cuerpos y, de ser el caso, proporcionar el apoyo correspondiente a sus familiares.
Viajaban hacinados en la embarcación desde México
Salvavidas locales, la Guardia Costera y otras agencias respondieron alrededor de las 10:30 de la mañana del 2 de mayo a un reporte de un bote volcado cerca de la península de Point Loma, según el Departamento de Bomberos y Rescate de San Diego.
Del reporte preliminar se había indomado que las cuadrillas sacaron del agua a siete personas, incluyendo tres que se habían ahogado, informó el teniente Rick Romero del Servicio de Salvavidas de San Diego. Una persona fue rescatada de un peñasco y otras 22 personas lograron llegar a la orilla por sí solas.
“Una vez que llegamos al lugar, el bote estaba prácticamente desecho”, dijo Romero. “Las condiciones eran bastante difíciles: Olas de 5 a 6 pies (más de metro y medio), viento y frío”.
Según las autoridades, el grupo viajaba hacinado a bordo de una embarcación de 12 metros (40 pies) de eslora con cabina, la cual era más larga que las típicas lanchas de madera utilizadas a menudo por los contrabandistas para traer personas ilegalmente a Estados Unidos desde México.
“Desde nuestra perspectiva, todo indica que se trataba de una lancha de traficantes. No hemos confirmado su nacionalidad”, dijo Jeff Stephenson, agente supervisor de la Patrulla Fronteriza.
Agentes acudieron a hospitales para entrevistar a los sobrevivientes, incluyendo al capitán de la embarcación, un hombre al que Stephenson se refirió como un “supuesto traficante”. Por lo general, los traficantes enfrentan cargos federales.
Jose Ysea, portavoz del Departamento de Bomberos y Rescate de San Diego, dijo que cuando llegó al lugar, ubicado cerca del Monumento Nacional Cabrillo, había “una gran extensión de escombros” de madera rota y otros objetos que flotaban en el mar picado.
“Esa zona de Point Loma es muy rocosa. Es posible que las olas golpearan el bote hasta romperlo”, comentó el vocero.
Había chalecos salvavidas a bordo de la embarcación, pero se desconoce cuántos, ni si los pasajeros los llevaban puestos, indicaron las autoridades.
Entre los rescatistas había un elemento no identificado de la Marina que se encontraba en la zona con su familia y saltó al agua para ayudar a algunas de las víctimas, labor que Romero describió como “de gran ayuda”.
Las autoridades creen que se ha localizado a todas las personas que iban a bordo, pero equipos de rescate continuaron revisando la zona durante varias horas en busca de posibles sobrevivientes, indicó Ysea.
Las autoridades fronterizas interceptaron el jueves una lancha que viajaba sin luces de navegación a 18 kilómetros (11 milas) de Point Loma con 21 personas a bordo. Las autoridades detuvieron a los 15 hombres y seis mujeres. Los agentes determinaron que se trataba de ciudadanos mexicanos que no tenían autorización para ingresar a Estados Unidos, según un comunicado difundido por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus iniciales en inglés). Dos de las personas a bordo, los supuestos traficantes, enfrentarán cargos federales, se informó.
La Patrulla Fronteriza anunció el viernes que las autoridades reforzarían sus operaciones para frenar el tráfico de personas por vía marítima frente a las costas de San Diego este fin de semana.
Conforme el clima en San Diego se torna más cálido, surge la idea errónea de que ello hará que los ingresos ilegales al país serán más seguros y más fáciles, comentó la agencia en un comunicado.
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