Herat, capital de la provincia homónima, ubicada a un centenar y medio de kilómetros de la Irán, fue completamente tomada por los talibanes, según informó una fuente de seguridad. Los talibanes izaron su bandera en lo alto del cuartel policial de Herat, indicó un corresponsal de la agencia de noticias AFP, añadiendo que los rebeldes no encontraron resistencia.
"El enemigo huyó. Decenas de vehículos militares, armas y municiones cayeron en manos" rebeldes, tuiteó el portavoz talibán, Zabihulá Mujahid.
En las últimas semanas, Herat había sido escenario de intensos combates entre insurgentes y ejército, respaldado por las milicias de Ismail Khan, un conocido señor de la guerra local. Los talibanes ya se habían hecho con gran parte de la provincia, incluido el paso fronterizo de Islam Qala, un importante punto de intercambio comercial con Irán.
Previamente el gobierno había confirmado la caída de Ghazni, la capital provincial más cercana a Kabul tomada hasta ahora y un punto de comunicación entre la capital y Kandahar, la segunda ciudad afgana, según expresó Mirwais Stanikzai, portavoz del Ministerio de Interior, que después informaría de la detención del gobernador de la provincia por las fuerzas armadas.
Aparentemente el responsable habría intentado huir de la localidad con el visto bueno de los talibanes, sin embargo esa información no pudo ser verificada.
Frente al deterioro de la situación, el gobierno propuso a "los talibanes un reparto de poder a cambio del fin de la violencia", dijo uno de los negociadores del ejecutivo en Doha, donde prosiguen las conversaciones de paz entre gobierno e insurgentes, iniciadas en septiembre de 2020.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, rechazó hasta ahora la idea de un gobierno que incluya a los talibanes. A esto se añade que los insurgentes, que antes contemplaban con agrado la idea, podrían rechazarla ya que su ofensiva ha avanzado a un ritmo vertiginoso en estos días.
En apenas una semana, tomaron el control de 11 de las 34 capitales provinciales afganas, siete de las cuales en el norte, una región que se les había resistido en el pasado. También rodearon Mazar-i-Sharif, la ciudad más importante del norte, donde Ghani se reunió el miércoles con diversos responsables para intentar reanimar a las tropas y las milicias leales al gobierno.
LAT