Un informe de investigación estatal reveló que el autor del tiroteo escolar en una primaria de Uvalde, Texas, sufría de acoso escolar y bullying.
Salvador Ramos, quien fue el que ocasionó la masacre, una vez fue objeto de acoso cuando era estudiante de cuarto grado en una de las mismas aulas donde ocurrió el tiroteo. Sus compañeros se burlaron de él por su tartamudeo, cabello corto y por usar la misma ropa casi todos los días, dijeron familiares a los investigadores.
De hecho, este informe detalla que el asesino dejó tantos indicios de que era violento y que estaba obsesionado con la notoriedad, que sus antiguos compañeros empezaron a llamarle el ‘pistolero escolar’.
Y es que, Ramos comenzó a postear cosas inusuales en sus redes sociales días antes de llevar a cabo el ataque, pues escribió que estaba a punto de hacer algo que lo pondría en las noticias, además, expresó que había intentado quitarse la vida.
También, compartió videos en línea de decapitaciones y sexo violento, y envió imágenes de sí mismo conduciendo con alguien que conoció en internet sosteniendo una bolsa de plástico que contenía un gato muerto y apuntando a la gente con pistolas de balines desde la ventana de un auto.
A pesar de muchas señales de advertencia, se las arregló para acumular legalmente más de cinco mil dólares en armas, municiones y equipo en las semanas previas al tiroteo.
Por último, el informe apuntó a que Ramos quería centrarse en la notoriedad de su persona.
“Creía que sus canales en TikTok y YouTube tendrían éxito. La pequeña cantidad de visitas que recibió lo llevó a decirles a aquellos con quienes interactuaba que él era 'famoso' y que ellos, en comparación, eran meramente aleatorios", señala el informe.
Son 77 páginas las que tiene el informe, mismo que se basó en entrevistas con familiares, testimonios y datos del teléfono de Ramos, presenta un largo rastro de indicios inquietantes antes de la masacre.
MQ