Al menos nueve personas murieron por los tornados que destruyeron casas y dejaron sin electricidad a decenas de miles en el sureste de Estados Unidos, anunciaron este viernes funcionarios locales, además destacaron que se esperaba que la cifra de muertos en el centro de Alabama aumentara.
Las tormentas del jueves se extendieron desde Mississippi hasta Georgia. Al menos cinco tornados tocaron tierra en el centro de Alabama, según la meteoróloga del Servicio Nacional de Meteorología, Jessica Laws. Uno de esos tornados potencialmente rastreó unas 150 millas (241 km) desde el suroeste de Selma, Alabama, hasta la frontera entre Georgia y Alabama, dijo.
Los equipos de rescate estaban buscando personas desaparecidas en el condado de Autauga en Alabama, donde se han reportado siete muertes, dijo el director de manejo de emergencias, Ernie Baggett, en MSNBC. Dio crédito a las escuelas por salvar más vidas al no dejar salir a los estudiantes antes de tiempo.
Baggett mencionó que al menos 40 casas fueron destruidas o dañadas gravemente, incluidas varias casas móviles que fueron lanzadas al aire. “No sólo fueron derribadas por el aire. Volaron cierta distancia”.
En Selma, los miembros del cabildo se reunieron en una acera usando las luces de sus celulares para declarar el estado de emergencia.
En Georgia, el gobernador Brian Kemp confirmó que dos personas habían muerto en las tormentas del jueves. Un niño de 5 años murió después de que un árbol cayera sobre un automóvil, dejando a un pasajero adulto en estado crítico mientras conducía a casa, dijo la forense del condado de Butts, Lacey Prue.
Un empleado estatal también murió mientras respondía a la tormenta, dijo Kemp.