El presidente Donald Trump afirmó que su campaña fue "ilegalmente espiada" en el 2016, al tiempo que acusó en sus redes sociales al FBI de esa acción a través de Carter Page, un asesor de política exterior para la campaña.
Trump insistió que tuvo una "gran" reunión con el presidente ruso, Vladimir Putin, y dijo que su campaña fue "ilegalmente espiada" en 2016, lo que lo puso en desacuerdo con senadores de su propio partido.
El mandatario estadunidense todavía está lidiando con las consecuencias de su conferencia de prensa con Putin en Helsinki, Finlandia, donde mantuvo una reunión a puertas cerradas con el líder ruso y luego pareció aceptar la afirmación de su homólogo de Rusia, quien dijo que no se había entrometido en los comicios de Estados Unidos.
El presidente tuvo que aclarar algunos de sus comentarios al regresar a Estados Unidos.
El senador republicano Marco Rubio de Florida dijo que Trump dejó una mala impresión al no hacer frente a Putin en persona. "Ojalá hubiera sido diferente", dijo Rubio a la cadena CNN.
"Tuve una GRAN reunión con Putin y Fake News usó toda su energía para intentar desacreditarla. ¡Tan malo para nuestro país! ", escribió Trump en Twitter.