Igor Pedin y su perrita Zhu-Zhu recorrieron al menos 200 kilómetros a pie para llegar a la ciudad de Zaporizhzhia, Ucrania en búsqueda de refugio, sin embargo, ahora Igor teme por la vida de su fiel compañera.
De acuerdo con Pedin de 61 años, él y Zhu-Zhu salieron de Mariúpol tras la invasión del ejército ruso a la ciudad. En su travesía pasaron por 24 puntos de control hasta llegar a Zaporizhzhia, donde consiguieron albergarse en un refugio seguro.
Sin embargo, Zhu-Zhu sufre consecuencias por la larga caminata, ya que la lomita de nueve años presenta daños en su sentido del olfato, se muestra asustada ante cualquier ruido similar a explosiones o balazos y sus patitas se cortaron gravemente al caminar sobre vidrios.
Actualmente Igor y Zhu-Zhu están en Kiev, a la espera de encontrar un veterinario que ayude a la perrita que cojea. Sólo cuentan con poco dinero y con el apoyo de los padres de Igor, Georgy de 87 años y Yevdokiya de 84.
Además, de acuerdo con Pedin, Zhu-Zhu no se deja examinar ya que intenta morderlo de inmediato si trata de revisar su patita delantera derecha, de la que cojea.
El amor que le tienen Igor a Zhu-Zhu es evidente, sobretodo, porque acaricia las orejas de la lomita cuando esta se espanta por los sonidos de la guerra. Incluso, ahora Zhu-Zhu llora cuando Pedin no está cerca.
Según Igor, Zhu-Zhu es la más pequeña de una camada de 12 lomitos que nacieron en 2013 y desde entonces es su fiel compañera. Por ello, Pedin afirma que no puede imaginarse una vida sin ella, y que le prometió salir de Mariúpol con vida antes de que emprendieran su viaje a un refugio seguro.
Ahora Pedin sólo busca ayuda para curar las heridas su amiga, quien padece día con día los estragos de la guerra entre Ucrania y Rusia.
MRG