Durango.- Después de que sus nietos sufrieran agresiones físicas y psicológicas, doña Esther se mantiene en lucha para que las autoridades puedan otorgarle su custodia y poderlos alejar del maltrato de su madre y su actual pareja sentimental.
Tratando de mejorar las condiciones de vida de los menores, la señora Esther les ofreció asilo en su morada, sin embargo, las condiciones en las que estos arribaron no eran integras, ya que, hasta el día de hoy, cada que los niños escuchan tocar la puerta, corren despavoridos alejándose de la misma, pensando que son sus padres que vienen a recogerlos.
Con varios intentos de fuga, lesiones sobre su cuerpo y agresiones verbales, el mayor de los infantes ha recurrido hacia los brazos de su abuela buscando refugio debido a que el trato de sus padres no le permite acudir a la escuela o calzar y vestir de manera propicia.
Las acciones legales ya han comenzado, el DIF estatal y la fiscalía del estado, ya han tomado cartas en el asunto. Uno de los médicos pertenecientes a estos organismos, ha iniciado recabando el testimonio del infante de menor edad, además de evaluar los distintos golpes que este ostenta sobre su cabeza
Según el testimonio de doña Esther, en primera instancia, la respuesta por parte de desarrollo integral, ha sido la devolución de los menores hacia sus agresores, sin embargo, esto no ha significado el abandono de sus nietos, ya que, al día de hoy, esta suplica a las autoridades evaluar a fondo la problemática para que los niños no vuelvan a sufrir una agresión por parte de sus padres.