CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que aunque “sí es grave” que sacerdotes comentan abusos sexuales, él no debe “tratar estos temas” porque lo que su gobierno quiere es “mantener una buena relación con las iglesias”.
Luego de que a finales del año pasado los legionarios de Cristo reconocieron que en los últimos años sus sacerdotes cometieron 175 abusos sexuales, de los cuales, 60 fueron cometidos por el padre Marcial Maciel, el Presidente consideró que es un tema que no debe de abordar.
“Que se apegue a la ley (las investigaciones) pero sin politizar estos temas, en lo que a mí corresponde no conviene que el presidente trate estos temas. Solo si se denuncia un delito podríamos actuar opinando porque también hay instancias para estos casos.
Al preguntarle directamente si en lo personal no considera graves estos hechos que son reconocidos muchos años después de haberse cometido, replicó que “Sí es grave, no deben cometerse estos actos” pero insistió en que deben debatirse y reflexionarse en otras áreas y “que el presidente no se inmiscuya en estos temas, todos a portarnos bien eso sí”.