México.- Una pasajera en un vuelo de la aerolínea Viva Aerobus fue agredida por los demás pasajeros, luego de que las azafatas afirmaran en voz alta que estaba contagiada de Covid-19.
Después de hora y media de discusión, la mujer, identificada como Beatriz, optó por bajarse del avión, pues para este punto ya le habían bajado su equipaje y la habían amenazado con llamar a la Guardia Nacional.
Fue el pasado 2 de diciembre cuando la mujer viajó a Mérida para encontrarse con su esposo. Cuando abordó su vuelo de regreso a la capital del país, cuando notó que la aerolínea no acataba ninguna medida sanitaria como la sana distancia o toma de temperatura.
Según narró la mujer de 65 años, al ver lo lleno que estaba el avión decidió cambiarse a las filas de atrás, pegada a una ventanilla para evitar estar cerca del pasillo. Sin embargo, poco después se llenaron los otros dos asientos y una mujer se acomodo “a sus anchas” recargándose muy cerca de ella, por lo que le pidió que guardara la distancia.
Cuando la otra pasajera le preguntó que si le molestaba su presencia, Beatriz contestó que no, pero que tenía un hermano que había enfermado hace dos meses. Esto solo como argumento para dar a entender que cualquiera se puede contagiar en cualquier momento, sin embargo, la otra mujer dio por hecho que Beatriz también estaba contagiada, por lo que le pidió a las azafatas que la cambiaran de lugar.
Tras esto, la sobrecargo le pidió a Beatriz que se bajara del vuelo, diciendo en voz alta que tenía coronavirus.
La disputa entre bajar o no a Beatriz del avión duró hora y media. El capitán del vuelo advirtió a través del megáfono que, si no se bajaba, no despegarían, lo que provocó mayor molestia entre los tripulantes, quienes comenzaron a agredirla verbalmente.
Finalmente, cuando vio que habían bajado su equipaje, y tras hora y media de discusión, la mujer decidió abandonar el avión, provocando aplausos entre los demás pasajeros.
Finalmente, tomó el siguiente vuelo a la Ciudad de México. En la espera, personal médico le tomó la temperatura y midió su oxigenación, dando como resultado 36° y oxigenación al 97 por ciento.
La mujer narró haber vivido una pesadilla en su vuelo. “Me sentí impotente y amenazada, por la noche no pude dormir”.
México.- Una pasajera en un vuelo de la aerolínea Viva Aerobus fue agredida por los demás pasajeros, luego de que las azafatas afirmaran en voz alta que estaba contagiada de Covid-19.
Después de hora y media de discusión, la mujer, identificada como Beatriz, optó por bajarse del avión, pues para este punto ya le habían bajado su equipaje y la habían amenazado con llamar a la Guardia Nacional.
Fue el pasado 2 de diciembre cuando la mujer viajó a Mérida para encontrarse con su esposo. Cuando abordó su vuelo de regreso a la capital del país, cuando notó que la aerolínea no acataba ninguna medida sanitaria como la sana distancia o toma de temperatura.
Según narró la mujer de 65 años, al ver lo lleno que estaba el avión decidió cambiarse a las filas de atrás, pegada a una ventanilla para evitar estar cerca del pasillo. Sin embargo, poco después se llenaron los otros dos asientos y una mujer se acomodo “a sus anchas” recargándose muy cerca de ella, por lo que le pidió que guardara la distancia.
Cuando la otra pasajera le preguntó que si le molestaba su presencia, Beatriz contestó que no, pero que tenía un hermano que había enfermado hace dos meses. Esto solo como argumento para dar a entender que cualquiera se puede contagiar en cualquier momento, sin embargo, la otra mujer dio por hecho que Beatriz también estaba contagiada, por lo que le pidió a las azafatas que la cambiaran de lugar.
Tras esto, la sobrecargo le pidió a Beatriz que se bajara del vuelo, diciendo en voz alta que tenía coronavirus.
La disputa entre bajar o no a Beatriz del avión duró hora y media. El capitán del vuelo advirtió a través del megáfono que, si no se bajaba, no despegarían, lo que provocó mayor molestia entre los tripulantes, quienes comenzaron a agredirla verbalmente.
Finalmente, cuando vio que habían bajado su equipaje, y tras hora y media de discusión, la mujer decidió abandonar el avión, provocando aplausos entre los demás pasajeros.
Finalmente, tomó el siguiente vuelo a la Ciudad de México. En la espera, personal médico le tomó la temperatura y midió su oxigenación, dando como resultado 36° y oxigenación al 97 por ciento.
La mujer narró haber vivido una pesadilla en su vuelo. “Me sentí impotente y amenazada, por la noche no pude dormir”.