REYNOSA.- La desesperación de extranjeros por llegar a territorio estadounidense sumó dos víctimas mortales este sábado en la frontera de Reynosa y dejó sin su padre a un menor de edad que fue testigo de su muerte.
Un niño migrante de tan solo 5 años de edad, originario de Honduras, quedó en orfandad luego de que su padre muriera electrocutado cuando trataba de cruzar hacia Estados Unidos a través de una infraestructura federal restringida que conecta a la ciudad de Reynosa, Tamaulipas con la frontera de Mission, Texas.
Fue cerca de la 1:30 horas de este sábado que una ambulancia de Protección Civil Regional atendió el llamado de un hombre de alrededor de 30 años gravemente lesionado en las márgenes del río Bravo a la altura de las compuertas, sin embargo ya no contaba con signos vitales, por lo que se dio aviso a las corporaciones.
Horas más tarde otro extranjero falleció en esa misma frontera. El cuerpo de un hombre identificado como Ángel "N" de 24 años, originario de Ecuador fue extraído de las aguas del río Bravo a las 11:00 horas a la altura del Centro Recreativo “La Playita” luego de que las autoridades mexicanas recibieran el reporte por parte de Estados Unidos sobre el avistamiento de un cadáver flotando en el cauce.
mvls