La elaboración de productos petrolíferos por refinería de Pemex en el país cayó a más de la mitad durante el sexenio del ex presidente Enrique Peña Nieto, pasando de un millón 275 mil 757 barriles diarios en promedio durante el 2013 a solo 628 mil 507 en el 2018, de acuerdo con estadísticas de la paraestatal publicadas ayer en el portal de la petrolera.
La refinería de Ciudad Madero en el estado de Tamaulipas fue la que casi desapareció en cuanto a producción de refinados, al caer un 84 por ciento, en segundo lugar se encuentra la de Minatitlán que cayó un 78 por ciento en su producción.
La refinería que menos fue afectada por la caída en la elaboración de productos fue la de Salamanca, en el estado de Guanajuato, que entre 2013 y 2018 registró una baja del 29 por ciento según las estadísticas de Pemex.
Por productos, la gasolina Pemex Premium fue la que técnicamente dejó de producirse en el país pues pasaron de producirse al inicio del sexenio anterior 19 mil 835 barriles diarios a solo mil 888 barriles diarios entre las seis refinerías con que cuenta el país, así la reducción fue del 90 por ciento.
Se redujo también la producción de gasolina Magna en un 98 por ciento sin embargo esto se debió a un proyecto de la paraestatal para que todas sus gasolinas fueran ultra bajas en plomo (UBA) por lo que se invirtieron alrededor de 3 mil millones de dólares para revertir el uso de combustible que contiene de entre 300 a 600 partes por millón (ppm) -mayor cantidad de azufre- y llevarla a niveles de entre 30 y 80 ppm.
Pero no fue suficiente pues la producción de Magna UBA, apenas alcanzó en 2017 el pico de producción de 238 mil 651 barriles diarios, cayendo esta en 2018 a 186 mil 374 barriles, mientras que en 2013 la producción de Magna era de 360 mil 483 barriles diarios.
Y mientras la producción de gasolina caía en el país, la importación de gasolina terminada para motores pasó de 184 mil barriles diarios en el 2013 a 425 mil barriles diarios en 2017 de acuerdo a la Agencia de Información sobre Energéticos de los Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés).
La producción de diésel tuvo una caída significativa pues esta fue de hasta un 68 por ciento en cuanto a Pemex Diésel, en tanto la producción de Diésel UBA no alcanzó los niveles óptimos para suplir al diésel convencional y la producción cayó de 92 mil barriles diarios a solo 49 mil barriles en números redondos.
El caso más crítico es el de la refinería de Ciudad Madero, Tamaulipas, pues de acuerdo a Petróleos Mexicanos en diciembre del año pasado, hace apenas un mes, la planta detuvo técnicamente su operación pues mientras su capacidad instalada es para procesar 190 mil barriles diarios de petróleo apenas produjo en diciembre 3 mil 658 barriles, pero de gas seco, mientras que redujo a cero la producción de gasolinas, apenas 27 barriles diarios de turbosina y 187 barriles diarios de diésel.
La refinería de Minatitlán en el estado de Veracruz, es la segunda más baja en producción y cuya capacidad instalada es de 285 mil barriles diarios, apenas produjo 14 mil 183 barriles en diciembre de 2018 lo que significa un descenso del 96 por ciento en su capacidad de producción diaria.
En tanto el tercer lugar lo ocupa la refinería de Salina Cruz en el estado de Oaxaca, esta planta tiene una capacidad instalada de 330 mil barriles diarios, mientras que en el último mes de 2018 operó al 50 por ciento de su capacidad con una producción de 150 mil 825 barriles diarios de productos petrolíferos.