MÉXICO.- En el informe de Medición de la Pobreza 2020, presentado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), se indica que entre 2018 y 2020 el porcentaje de la población en situación de pobreza a nivel nacional aumentó de 41.9 por ciento a 43.9 por ciento.
Esto representa un aumento de dos puntos porcentuales durante este periodo, y significa un incremento de la población en situación de pobreza de 51.9 a 55.7 millones de personas durante este periodo, es decir, un aumento de 3.8 millones de personas.
Asimismo, el porcentaje de la población total en situación de pobreza extrema aumentó de siete a 8.5 por ciento entre 2018 y 2020, lo cual significa que pasó de 8.7 a 10.8 millones de personas, es decir, un incremento de 2.1 millones de personas.
Junto con esta situación, en estos dos años la población con ingreso inferior a la Línea de Pobreza Extrema por Ingresos aumentó de 14 a 17.2 por ciento a nivel nacional. En este sentido, el número de personas que, aun destinando todo su ingreso a la compra de alimentos, no puede adquirir los productos de la canasta alimentaria; aumentó de 17.3 a 21.9 millones de personas durante este periodo.
En el caso de la Población con ingreso inferior a la Línea de Pobreza por Ingresos, ésta mostró un aumento, al pasar de 49.9 a 52.8 por ciento, lo cual representa que el número de personas que no cuenta con los recursos suficientes para adquirir los bienes y servicios que precisa para satisfacer sus necesidades aumentó, al pasar de 61.8 a 66.9 millones de personas en este periodo.
En relación al rezago educativo, este se mantuvo en niveles similares, al pasar de 19 a 19.2 por ciento, lo que representa un aumento de 23.5 a 24.4 millones de personas durante este periodo, es decir, 0.9 millones de personas.
Sobre la carencia por acceso a los servicios de salud, el porcentaje de la población con carencia mostró un aumento a nivel nacional, al pasar de 16.2 a 28.2 por ciento, lo que significa un aumento de 15.6 millones de personas respecto a 2018, al pasar de 20.1 a 35.7 millones de personas en 2020.
De las carencias por acceso a la seguridad social, se observa una disminución en el porcentaje de la población, que paso de 53.5 a 52.0 por ciento entre 2018 y 2020.
En relación a la carencia por calidad y espacios de la vivienda el porcentaje de la población, este ámbito mostró una disminución a nivel nacional entre 2018 y 2020, al pasar de 11.0 a 9.3 por ciento, y el número de personas pasó de 13.6 a 11.8 millones; mientras que en la carencia por acceso a los servicios básicos en la vivienda se mostró una disminución al pasar de 19.6 a 17.9 por ciento, lo que habla de una reducción de 1.5 millones de personas, al disminuir de 24.3 a 22.7 millones de personas.
A nivel estatal, entre 2018 y 2020, en 19 de las 32 entidades federativas se observa un aumento en el porcentaje de la población en situación de pobreza. Las tres entidades que mostraron el mayor aumento en este indicador fueron: Quintana Roo (30.2 a 47.5 por ciento), Baja California Sur (18.6 a 27.6 por ciento) y Tlaxcala (51 a 59.3 por ciento).
En relación a la población en situación de pobreza extrema, entre 2018 y 2020, 26 de las 32 entidades federativas mostraron un aumento en este indicador. Las entidades con el mayor aumento el porcentaje de la población en situación de pobreza extrema fueron Quintana Roo (3.8 a 10.6 por ciento), Tlaxcala (3.3 a 9.8 por ciento) y Yucatán (6.5 a 11.3 por ciento).
El Coneval precisó que la medición multidimensional de la pobreza coincide con una pandemia en curso, cuyo desenlace e implicaciones para el desarrollo social son aún inciertos.
Por lo cual, esta información ofrece un primer panorama completo de las implicaciones de la emergencia sanitaria en el ingreso y las carencias sociales de las y los mexicanos en 2020.
“La emergencia sanitaria por covid-19 ha profundizado los desafíos que enfrenta la política de desarrollo social en todos los ámbitos, principalmente en el ingreso, salud, educación y alimentación de la población mexicana”, precisó el Coneval.
Destacó que, en este contexto, los resultados de la medición multidimensional de la pobreza son un insumo clave para enfrentar el desafío de la recuperación del ingreso de las personas y ofrecer atención prioritaria a los grupos y regiones más severamente afectados.
mvls