MÉXICO. - El Banco Mundial (BM) previó que, ante la emergencia sanitaria por el coronavirus, el Producto Interno Bruto (PIB) de México caerá 6.0 por ciento este año, de acuerdo con su informe La Economía en tiempos de covid-19, divulgado previo a la reunión virtual de primavera.
El organismo internacional reconoció que para 2021 se espera “un retorno del crecimiento de 2.6 por ciento”; sin embargo, señaló que los países de América Latina y el Caribe, incluyendo México, deben dar respuestas múltiples en materia de políticas públicas para apoyar a los más vulnerables, evitar una crisis financiera y proteger los puestos de trabajo.
En este contexto, el Bando Mundial destinará 160 mil millones de dólares en apoyo financiero durante los próximos 15 meses para ayudar a los países a proteger a los pobres y vulnerables, respaldar las empresas y afianzar la recuperación económica.
Recomendó que los actuales programas de protección y asistencia social sean ampliados rápidamente, así como también su cobertura.
Al mismo tiempo, es probable que los distintos gobiernos deban respaldar a las instituciones del sector financiero y a las fuentes de empleo más importantes.
“Debemos ayudar a las personas a enfrentar estos desafíos mayúsculos y asegurarnos que los mercados financieros y los empleadores puedan capear esta tormenta”, dijo vicepresidente en funciones para la región de América Latina y el Caribe, Humberto López.
Reconoció que, en los últimos 12 meses, una serie de convulsiones impactaron sobre el crecimiento económico de la región, comenzando por las tensiones sociales, el colapso en los precios internacionales del petróleo y ahora la crisis del covid-19, y como resultado de ello, el crecimiento se está viendo afectado. Dijo que la pandemia del coronavirus provoca un gran shock de oferta.
Se prevé que la demanda de China y los países del G7 decaiga abruptamente, impactando a los países exportadores de materias primas en América del Sur y a los países exportadores de servicios y bienes industriales en América Central y el Caribe, mientras un colapso del turismo tendría un impacto muy severo en algunos países caribeños.
Al mismo tiempo, agregó, los gobiernos deberán asumir la mayor parte de las pérdidas.
La socialización de estas pérdidas podría demandar una participación accionaria en las instituciones financieras y en los empleadores estratégicos, a través de su recapitalización, apoyo que será clave en la preservación de puestos de trabajo y en una futura recuperación.
cog
MÉXICO. - El Banco Mundial (BM) previó que, ante la emergencia sanitaria por el coronavirus, el Producto Interno Bruto (PIB) de México caerá 6.0 por ciento este año, de acuerdo con su informe La Economía en tiempos de covid-19, divulgado previo a la reunión virtual de primavera.
El organismo internacional reconoció que para 2021 se espera “un retorno del crecimiento de 2.6 por ciento”; sin embargo, señaló que los países de América Latina y el Caribe, incluyendo México, deben dar respuestas múltiples en materia de políticas públicas para apoyar a los más vulnerables, evitar una crisis financiera y proteger los puestos de trabajo.
En este contexto, el Bando Mundial destinará 160 mil millones de dólares en apoyo financiero durante los próximos 15 meses para ayudar a los países a proteger a los pobres y vulnerables, respaldar las empresas y afianzar la recuperación económica.
Recomendó que los actuales programas de protección y asistencia social sean ampliados rápidamente, así como también su cobertura.
Al mismo tiempo, es probable que los distintos gobiernos deban respaldar a las instituciones del sector financiero y a las fuentes de empleo más importantes.
“Debemos ayudar a las personas a enfrentar estos desafíos mayúsculos y asegurarnos que los mercados financieros y los empleadores puedan capear esta tormenta”, dijo vicepresidente en funciones para la región de América Latina y el Caribe, Humberto López.
Reconoció que, en los últimos 12 meses, una serie de convulsiones impactaron sobre el crecimiento económico de la región, comenzando por las tensiones sociales, el colapso en los precios internacionales del petróleo y ahora la crisis del covid-19, y como resultado de ello, el crecimiento se está viendo afectado. Dijo que la pandemia del coronavirus provoca un gran shock de oferta.
Se prevé que la demanda de China y los países del G7 decaiga abruptamente, impactando a los países exportadores de materias primas en América del Sur y a los países exportadores de servicios y bienes industriales en América Central y el Caribe, mientras un colapso del turismo tendría un impacto muy severo en algunos países caribeños.
Al mismo tiempo, agregó, los gobiernos deberán asumir la mayor parte de las pérdidas.
La socialización de estas pérdidas podría demandar una participación accionaria en las instituciones financieras y en los empleadores estratégicos, a través de su recapitalización, apoyo que será clave en la preservación de puestos de trabajo y en una futura recuperación.
cog