MONTERREY.- Este domingo Jaime Rodríguez Calderón se despidió de su cargo como gobernador, inaugurando unas obras de recarpeteo en García.
Cerca de las 11:20 de la mañana llegó Rodríguez Calderón hasta la avenida Heberto Castillo para reabrir la vialidad, y durante su último mensaje de una hora con 10 minutos, reveló que le deja algunas "bombas" a Samuel García pero auguró que será un buen bombero.
“Tiene adversidades, le vamos a dejar, como él dice "bombas", pero se que va a ser un buen bombero, que las va a desactivar y las va a lograr llevar adelante. Me hubiera gustado dejarle una casa nueva pero no fue posible pero va a tener la capacidad para poder sortear los problemas que todos los días tiene Nuevo León”, dijo el mandatario estatal.
Además, se dijo satisfecho con el trabajo que hizo durante los seis años, pero mencionó que no desea aplausos ni reconocimientos.
“Sé que puse todo mi esfuerzo, pero no necesito ni aplausos ni reconocimientos, es mi trabajo por eso me llevaron al gobierno. También recibiré las críticas y las tengo que recibir porque así es esto y aguantar", dijo.
Tras su salida, Rodríguez Calderón, se resguardará un tiempo, y aunque no precisó el número indicó que pedirá más de 10 escoltas para su protección y la de su familia.
“Yo mismo necesito no moverme tanto, es decir siempre hay enojados y más porque cerré el penal del Topo Chico y tomaré mis precauciones; No puedo ir a un restaurante con mi familia, no puedo llevarlos al cine y no quiero llevarlos no quiero que carguen con esa circunstancia", mencionó.
“Normalmente traigo yo, tres por vehículo y tengo dos vehículos, y el chófer siete, y el que cuida la casa ocho, mi esposa y mis hijos son los que podrán tener, es algo a lo que tengo derecho pero no tendré un exceso de seguridad”, afirmó.
Y durante este tiempo, el gobernador saliente aseguró que se convertirá en tiktokero y gamer, e incluso reveló que ya tiene quién le regale su silla y audífonos para jugar junto a su hijo Emiliano.
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