CIUDAD DE MÉXIO. – La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) informó sobre la detención de un sujeto identificado como Abel “N”, de 29 años de edad, posible integrante del grupo delictivo La Unión Tepito, y señalado como posible coautor material del homicidio de dos niños de origen mazahua ocurrido en 2020, en calles del Centro Histórico.
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El detenido habría sido identificado por Édgar ‘N’, El Choche, de 39 años, como quien ordenó tirar los cuerpos de los dos menores a cambio de drogas.
La detención del sujeto se realizó al exterior del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, ubicado en la colonia Lomas de San Lorenzo, alcaldía Iztapalapa, donde se encontraba recluido luego que en abril fuera detenido por posibles delitos contra la salud.
Tras ser notificado de la acusación en su contra por la posible comisión del delito de homicidio calificado, y luego de la lectura de sus derechos, el individuo fue puesto a disposición de un juez de control que lo requirió.
Cae sujeto que transportaba restos humanos en un diablito en calles del Centro Histórico
La madrugada del 1 de noviembre un hombre fue detenido por policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) cuando caminaba por calles del Centro Histórico con un diablito en el que transportaba los cadáveres mutilados de los menores Alan Yair (12) y Héctor Efraín (14).
Al llegar a República de Chile y Belisario Domínguez, los policías se percataron de que al hombre se le caía una de las cajas con bolsas de plástico negro, por lo que le solicitaron que mostrara lo que llevaba al interior de los empaques.
Al abrir las bolsas, los policías encontraron restos humanos.
Versiones periodísticas señalan que los niños vendían dulces en la zona, donde también vivían. Medios locales indican que la última vez que se les vio fue en realidad en la esquina de las calles Allende y Donceles, cerca del Zócalo.
Información proporcionada por familiares de los menores y por conocidos de los menores reveló que ambos asistirían a unos arrancones de moto, sin embargo, el “paseo” era en realidad una trampa para torturarlos, asesinarlos y posteriormente descuartizarlos.
PGG