Durango. La cancelación de romerías y peregrinaciones hacia el templo de san judas Tadeo, significó una pérdida económica para los cientos de comerciantes que solían instalarse sobre las inmediaciones del recinto.
Para doña Cruz Pérez, comerciante de antaño, el egreso que obtenía de los pedidos de los fieles devotos, así como del padre de la parroquia generó una tristeza inmensa, ya que las ganancias derivadas le permitían realizar un viaje de agradecimiento al cristo rey en el cerro del cubilete por la salud otorgada y la estabilidad económica, sin embargo, como ella misma lo narra, todo ocurre por la voluntad de dios.