MONTERREY.- El Covid-19 atentó contra la tradición milenaria en México de honrar a los muertos el 2 de noviembre, este lunes todos los panteones lucieron desolados ante el cierre que ordenó la Secretaría de Salud para evitar aglomeraciones.
Ejemplo de ello fue el panteón San Jorge, ubicado en la avenida Lincoln y Rangel Frías en Monterrey, donde los trabajadores municipales utilizaron trafitambos y cinta amarilla para clausurar la entrada.
Solo algunos vendedores de flores que tienen sus locales al exterior del campo santo, acudieron con la esperanza de lograr alguna venta con las personas que dedican altares en sus hogares.
El panteón únicamente tiene abiertas las oficinas para servicios de inhumación, pero no faltó algún despistado que llegó con la intención de acudir a la tumba de su familiar.
En el caso del panteón Las Escobas ubicado en el municipio de Guadalupe, este lució también vació, pues los ciudadanos respetaron las restricciones.
Además, los vendedores de flores tampoco se instalaron para intentar obtener algunos ingresos.
Este campo santo cerró sus puertas desde el pasado viernes y permanecerá así hasta el 4 de noviembre.
mvls