La calle Paseo de los Buenos Aires, en la colonia Buenos Aires, en Tlaquepaque, es la calle de las cruces y altares en recuerdo de las personas asesinadas. En un cuadrante que abarca desde Pedro Ceballos hasta Venustiano Carranza, hay al menos tres cruces, un altar y un mural con el rostro de un hombre asesinado.
El altar es para recordar el crimen de el Rojo. Tenía 16 años; fue muerto a balazos el año pasado. Dentro del altar está la fotografía de el Rojo y su madre María, privada de su libertad en 2019 por un comando. Días después, su cuerpo fue encontrado mutilado en bolsas negras de plástico.
A unos 50 metros de distancia está la primera cruz, fue colocada en el lugar exacto donde quedó el cuerpo de Javier Bañales Galván, el 24 de febrero del 2021. Los vecinos señalaron que a las 5 de la tarde se escucharon varios balazos, y al salir de sus casas vieron el cuerpo de Javier tendido sobre la banqueta .La víctima vivía a unas cuadras de distancia. El crimen nunca fue aclarado por la Fiscalía.
A otros 50 metros murió una mujer a balazos. El asesinato fue reportado el año pasado. Metros después, sobre Paseo de Los Buenos Aires, el cruce con Tandil, está la tercera cruz. El año pasado una mujer perdió la vida tras ser agredida a tiros mientras vendía tortas ahogadas.
En la esquina de Paseo de los Buenos Aires y la calle Catamarca, fue dibujado un mural en honor a Brayan, victimado en 2017. Los vecinos indicaron que cuatro familiares de Brayan corrieron la misma suerte. A unos metros del mural se ubica una finca, donde el año pasado un joven fue privado de su libertad; es fecha que no se sabe nada de su paradero.
Los homicidios son consecuencia de la guerra por el control del territorio entre el Cártel Jalisco Nueva Generación, liderado por Nemesio Oseguera Cervantes el Mencho, y el Cártel Nueva Plaza, de Carlos Enrique Sánchez el Cholo, cuyo cadáver fue abandonado la semana pasada en pleno centro de Tlaquepaque. La confrontación que libran las organizaciones criminales en las faldas del Cerro del Cuatro abarca al menos 22 colonias de Guadalajara y San Pedro Tlaquepaque y ha cobrado la vida de 476 personas en cinco años, según la estadística publicada por la Fiscalía de Jalisco en el portal Seguridad MAP, actualizada hasta el 31 de enero del 2021.
Las colonias más violentas del lado de Tlaquepaque son Nueva Santa María, que comparte jurisdicción con Guadalajara, entre ambos municipios suman 46 crímenes; le sigue Toluquilla con 40; Guayabitos con 27; Francisco I Madero segunda sección con 46, mientras que la primera sección reportó 24; Cerro del Cuatro, 16; Lomas del Cuatro, 13; El Refugio, 10; y Balcones del Cuatro, ocho.
En Guadalajara, los puntos con mayor incidencia de asesinados son: Echeverría con 43; Buenos Aires con 36; Lomas de Polanco con 32; Cinco de Mayo, 28; Lázaro Cárdenas reportó 21; El Carmen, 20; Nueva España, 14, Francisco Villa, ocho; 1 de Mayo, siete; y El Rocío, uno.
Contabilizando los 30 homicidios registrados de febrero a la fecha en dichas colonias, la cifra se dispara a 476 crímenes de 2017 a marzo del 2020.
Estos no son los únicos crímenes. En un parque ubicado en la calle Santiago de Linier, en la colonia Francisco I Madero, en Tlaquepaque, murieron baleados Jesús y Gerardo el 13 de mayo del 2018. Sus amigos y familiares colocaron en recuerdo una lona con las fotografías de las víctimas y se construyó un altar a San Judas Tadeo, dentro del cual se encuentra la fotografía de Cristóbal, quien también perdió la vida.
Para el investigador en temas de seguridad de la Universidad de Guadalajara, Francisco Jiménez Reynoso, la violencia disminuirá paulatinamente tras el asesinato de el Cholo.
“Creo que se irá aplanando la violencia, se van a diversificar probablemente otro tipo de actividades, pero ya va existir ese antagonismo, entonces creo que sí puede cesar la rivalidad mortal que se tenía a través de estos dos carteles, que finalmente ya se presentó a la cabeza del grupo de Nueva Plaza capturado, esposado y en rendición total”.
El especialista asegura que la violencia en el sector de la ciudad es consecuencia de la pobreza y falta de oportunidades.
“Existen muchas necesidades, hay carencias de todos los servicios públicos, hay carencia de transporte, y hay necesidad económica, esto lo aprovechan algunos grupos criminales para jalar simpatizantes, adeptos a sus movimientos que benefician económicamente y que activan la economía de estas personas en estas colonias marginadas que son olvidadas por las autoridades, y que económicamente comienzan a repartir despensas, dinero, pero luego están condicionados a hacer determinadas actividades, cómo podría ser la venta de drogas”.
De acuerdo con un estudio realizado por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), en la colonia Buenos Aires viven alrededor de 12 mil 46 personas, de las que 42.11% no tienen acceso a servicios de salud, 2.65% no tienen agua potable, 1% carece de drenaje y 5.76% no tiene insumos como refrigerador.
CGE