Durango, Dgo. Según el testimonio de la señora Mónica Beltrán, los amantes de lo ajeno que merodean los alrededores en la colonia Héctor Mayagoitía no solamente se han limitado a realizar sus fechorías en los hogares de los vecinos o transeúntes, sino también en el templo de San Judas Tadeo, ya que tan solo de lo que va del año, este ha sido saqueado más de seis veces.
La situación comienza a tornarse cada vez más peligrosa, ya que el miedo, la desconfianza y la inseguridad comienzan a propagarse a través de los feligreses al resto de la comunidad, generando que cada vez sea menos la gente que abandone sus hogares por largos lapsos de tiempo.
Una de las medidas de seguridad que se ha optado para asegurar el resguardo de sus bienes, es la comunicación directa entre vecinos. Ya qué tal y como lo menciona la señora Beltrán, las autoridades suelen brillar por su ausencia.