Para mitigar el riesgo de contagio de coronavirus en Jalisco, 160 elementos de Seguridad Pública del municipio de Zapopan fueron descansados en el transcurso del mes de marzo de manera paulatina. De acuerdo con el comisario de la corporación, Juan Pablo Hernández, los policías suspendidos pertenecen a sectores vulnerables, ya sea por su edad o por condiciones de salud.
"Ellos estaban realizando servicios de interiores, y al no tener en funcionamiento muchas de esas áreas, no nos está afectando en la fuerza de operación en la calle, es decir, prácticamente sigue la operatividad en el interior de las colonias del municipio", comentó.
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También se mandó a descansar a las policías municipales que se encuentran embarazadas o son madres, para quienes representa un riesgo el contagio del virus o el cuidado de los hijos les implica dificultades en la realización de sus labores diarias.
De acuerdo con el comisario, la fuerza operativa de la policía zapopana no ha visto afectada la atención a los reportes ciudadanos a pesar del incremento durante el mes de marzo de denuncias por violencia intrafamiliar derivadas del aislamiento domiciliario. En febrero la cantidad de reportes fue de 30, en marzo incrementó a 45, y en lo que va del mes de abril suman 10.
"Hemos detectado que los agresores no viven en el domicilio, de repente llegan y tratan de agredir de manera verbal a la mujer, pero ahorita haciendo una comparativa con el año anterior, está un poquito la baja, trimestralmente igual está la baja, sólo con un ligero incremento en marzo" puntualizó Hernández González.
Más del 50 por ciento de los reportes son realizados por terceros, es decir, por los vecinos o conocidos de las víctimas, mientras que el resto son notificados por las personas violentadas.
De igual manera, más de la mitad de los casos están relacionados con violencia entre parejas, con mayor incidencia de hombres hacia las mujeres, y en menor proporción se trata de violencia de madres hacia hijos.