En caso de que el Gobierno de Jalisco y los gobiernos municipales no respondan ante la solicitud de apoyo económico y en especie que han externado los migrantes de pueblos originarios que viven en el Zona Metropolitana de Guadalajara, tomarán medidas radicales, advirtieron durante una manifestación de la Coordinación de Indígenas Migrantes de la ZMG este miércoles.
"Lamentablemente se ha dicho que si esto sigue así, muchas personas van a tener que salir a robar, van a empezar los saqueos porque necesitan llevar alimento, no están recibiendo apoyo alguno y mucho menos ayuda o mesa de diálogo", comentó María García.
Desde que inició la emergencia sanitaria del coronavirus en Jalisco no han podido vender sus artesanías y por ende no tienen dinero para solventar los gastos necesarios.
Ellos comentan que aunque quisieran hacer el registro en la plataforma que habilitó el Gobierno del Estado para poder reabrir sus negocios, no pueden debido a que viven en constante movimiento en la ciudad y no tienen cómo comprobar su domicilio, además de otras circunstancias que les impiden cumplir con los requisitos.
"Muchos no tenemos el alcance de tener el internet, muchos no sabemos manejar una computadora, se nos hizo el apoyo para registrarnos, aquí el problema es que te piden la CURP y te piden el comprobante de domicilio. Nosotros radicamos en varios municipios por diferentes factores y ahí nos piden que mínimo tres meses", mencionó una de las inconformes.
Algunos de ellos se han visto orillados a salir a vender ante la falta del apoyo recibido durante los dos meses que no han podido trabajar; comentan que los inspectores siempre les quitan sus artesanías y cuando se las entregan, están en mal estado, también puntualizan recibir mal trato por parte de las autoridades municipales.
Parte de su molestia también radica en el recorte presupuestal del 75% que recibió el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), lo que imposibilita que la institución los apoye en situaciones críticas como la de esta pandemia.
"Ahorita queremos apoyo pero no podemos por lo mismo, porque el gobierno le ha quitado mucho presupuesto, y es lo que exigimos también, diálogo con el director para hacer algo", pidió una manifestante.
Por su parte, el director y delegado del INPI en Jalisco, Samuel Salvador Ortiz, externó que el panorama actual para los migrantes de pueblos originarios pinta fúnebre por la falta de apoyo.
"Es un tema complicado, no es la misma situación que viven ellos con el resto de la población, ahorita la necesidad fundamental aquí con los hermanos es el tema de los alimentos", dijo.
De acuerdo con datos oficiales, son 48 mil migrantes aproximadamente que radican en la ZMG, originarios de los pueblos purépecha, otomí, mixteco, triqui, wixárika, mazahua y náhuatl.
CGE