MÉXICO.- El Gobierno de Tamaulipas ha tenido dificultades para brindarle la atención a todos los migrantes, pues se han incrementado las deportaciones de personas desde los Estados Unidos, principalmente de extranjeros. Las autoridades estatales han solicitado al Instituto Nacional de Migración atender la problemática existente en Nuevo Laredo, Matamoros y Reynosa.
César Verástegui Ostos, secretario General de Gobierno, destacó detener el flujo en la región sur del país, lugar que aseguró se requiere mayor atención. Además, dentro de la reunión del Grupo de Coordinación, comentó que se ayuda con alimentación, pero se hace difícil cubrir tanta gente.
“Estamos hablando de un tema de migración, salud y seguridad, crece y va a seguir pasando en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros. Apoyamos con alimentación pero es muy difícil mantener a más y más gente. Esperemos que el gobierno federal tome cartas en el asunto y que trate de hacer el trabajo de migración en el sur del país y no en el norte”, apuntó.
Sin problemas con los mexicanos
Al afirmar el funcionario que la migración es un problema que siempre ha existido, destacó que el mayor conflicto al cual se enfrentan las autoridades tamaulipecas es en la deportación de extranjeros realizada por la Unión Americana, al ser depositados en el estado.
“Atendiendo a la reforma a la Ley de Migración, se les brinda a los caminantes la atención que puedan requerir, por tratarse de un tema humanitario. El estado no puede hacer gran cosa en ese sentido, porque es un tema de competencia estrictamente federal”, expuso Verástegui Ostos.
En el caso de los repatriados que manda los Estados Unidos, el secretario agregó que no existe mayor problema. En este caso, les ayuda a regresar a sus lugares de origen, aunque reconoció que existen algunos quienes llegan a las casas de migrantes o de las instituciones de migración.
elmm