La celebración de la Semana Santa en Guanajuato ofrece una serie de actividades que atrae la atención de personas de todas las edades. Desde la variedad en los tradicionales viacrucis hasta procesiones del silencio, pasajes bíblicos e incluso otros atractivos como la Judea que años tras año aumenta la asistencia de cientos de turistas y visitantes.
La celebración de la Semana Santa da inicio con el “Viernes de Dolores”, donde familias enteras colocaron la imagen de la Virgen acompañada de flores, ya sea al interior de sus domicilios, negocios o en la vía pública; se tiene la tradición de que las personas pasen casa por casa en donde haya un altar y pregunten si ¿ya lloró la virgen?, para recibir agua fresca, paleta o nieve. O bien flores como es la tradición en la Capital.
Enseguida viene el Domingo de Ramos, que se distingue por la procesión y bendición de las palmas que solo se hace una vez al año.
El lavamiento de pies
En la Catedral de León se realiza el lavatorio de pies, el cuál es encabezado por el Arzobispo de la ciudad, Alfonso Cortés Contreras, con esta tradición se busca hacer una representación de lo que hizo Jesús después de la última cena, que fue lavarle los pies a sus 12 apóstoles.
Este año la representación de la última cena dará inicio en punto de las cinco de la tarde del día de hoy. El lavamiento se replica en otras parroquias del estado, donde los personajes pueden ser desde sacerdotes, jóvenes pertenecientes algún apostolado, niños o gente en general.
Viacruscis
En León se tienen identificados 11 zonas o colonias donde se representan los viacrucis más tradicionales de la ciudad entre las que se ubican: El Barrio de San Miguel, Chapalita, El Coecillo, Las Huertas, San Juan Bosco, El Calvario entre otros.
En promedio los asistentes que acuden va desde las 200 a 500 personas, mientras que en Chapalita, que es el más grande llegan acudir más de 2 mil personas.
Barrio de Chapalita
El viacrucis de Chapalita, acapara las miradas de cientos de personas cada año por el dramatismo que se le imprime a la representación de la crucifixión y muerte de Jesús; ahí los azotes son tan reales que arranca el llanto de los niños y dolor a los mayores.
La procesión que hace el Cristo de Chapalita no es solo, es acompañado por cientos de personas que buscan ocupar el mejor lugar para no perder detalle; sin importarles las altas temperaturas que se registra ese día y pasar varios horas expuestos al sol, ya sea parados en las diferentes calles que se recorren, trepados en azoteas o árboles.
El Viacrucis se llevará a cabo este Viernes Santo a las 11 de la mañana, la representación del juicio arranca en el templo de Fátima en la colonia Arbide, después continua con el recorrido de las llamadas tres caídas. Por la calle Chiapas sur, tomarán el bulevar Las Palmas, siguiendo por Veracruz, darán vuelta por calle Puerto Rico a llegar a Campeche y después arribando Manuel de AustrI.
Más de 90 personas participan en la reencarnación de Jesucristo, que se suman en recorrer alrededor de 3 kilómetros, mientras que el Jesús de Chapalita carga la cruz.
Este evento con 56 años de tradición se sigue posicionando como uno de los atractivos más vistos por chicos y grandes en León, donde acuden personas incluso de otros municipios que no pierden cada detalle de la caracterización.
Barrio de San Miguel
Con azotes, caídas y llanto es como se vive la representación de la muerte del Mesías en el Barrio de San Miguel.
El Cristo de San Miguel será interpretado por Ray Israel Villegas Terrones quien por más de diez años lo ha venido representando con gran orgullo y satisfacción.
La representación dará inicio en la calle Independencia esquina con la calle Rio Bravo hasta el jardín principal de San Miguel. Esta representación se realiza desde hace más de 100 años en el barrio de San Miguel.
Barrio Arriba
Considerado uno de los viacrucis más antiguos de la ciudad, al sumar unos 100 años de su representación, se distingue por llevarse la crucifixión de Jesús en el monte de El Calvario ante la mirada de cientos de personas.
Previo se realiza un recorrido sobre las calles del Barrio Arriba entre ellas a Évano, Ardillas, 16 de Septiembre, Insurgentes, África, Allende y 27 Septiembre hasta subir a El Calvario; una representación que inicia desde el jueves santo, con la celebración de la santa misa y luego continúa con el lavatorio de pies.
En la realización de este viacrucis participan vecinos de la zona como voluntarios, quienes han logrado que continúe su realización que se ubica en el gusto de los leoneses y turistas que año con año asisten para presenciar este gran acto religioso basado en la muerte y resurrección del salvador.
Procesión del Silencio
Y para seguir celebrando estas fechas, el viernes por la noche en punto de las 7:30, en el Barrio del Coecillo se vivie una de las tradiciones más impactantes e imponentes de la ciudad, la Procesión del Silencio, donde participen principalmente personas encapuchadas, otros usan cadenas en los pies, además del uso de cirios, veladoras, flores y coronas de espinas forman parte de este único evento.
El recorrido se realiza por las calles; Héroes de la Independencia; Monterrey; La Luz; Iguala; Fray Daniel Mireles; Acapulco; Herreros; Jardín de San Francisco, terminando en el Templo de San Francisco dando El Pésame a la Señora de la Soledad, así lo informó Miguel Ángel Parra uno de los responsables de esta representación.
Para esta edición se espera la afluencia de unas 6 mil personas que puedan ver esta representación única en León y que se realiza en San Francisco de El Coecillo, donde participaran mil 200 personas.
Sábado Santo
La misa de resurrección se vive durante el sábado santo a media noche, donde en varios atrios de algunos templos conservan puestos de comida hasta altas horas de la noche para que familias leonesas disfruten no solo de la misa sino de todo la variedad gastronómica.
Quema de Judas
Este año se estarán quemando a un par de funcionarios del Estado y a varios amantes de lo ajeno ya que esta actividad la hacen en representación de la traición de Judas hacia Jesús.
Esta tradición cumple 104 años y se celebra en la esquina de las calles Amado Nervo y Hermanos Aldama, en el Barrio de Santiago, mejor conocida como "La Llamarada", es el único lugar en León que actualmente sobrevive la tradición donde se realiza.