GUANAJUATO.- Fueron tres aeronaves no tripuladas del Ejército y de la Marina las que establecieron con precisión el lugar donde se ocultaba José Antonio Yépez Ortiz, alias El Marro, líder del cártel de Santa Rosa de Lima, quien fue detenido esta madrugada al interior de una pequeña vivienda, ubicada en una comunidad rural de Guanajuato.
Las autoridades que participaron en el operativo realizado en la madrugada informaron a MILENIO que la localización de El Marro, en el municipio Juventino Rosas, debió ser eficiente y precisa para dar con el objetivo lo más rápido posible.
Para ello, fueron utilizados drones con el propósito de desarrollar una operación quirúrgica y evitar la acostumbrada reacción de la base social y sicarios de El Marro con lo que podrían impedir su captura o ayudarlo a fugarse.
Las autoridades ya tenían conocimiento que José Antonio Yépez Ortiz había abandonado Villagrán y Cortazar, los dos principales municipios que estaban bajo su control y en los que se ocultaba, esto para refugiarse en comunidades rurales de Juventino Rosas, Apaseo El Alto y Apaseo El Grande.
Según las autoridades federales y estatales, en el operativo se detuvo a cinco personas, se detectó arsenal y se logró la liberación de una empresaria que estaba secuestrada por el grupo delictivo.
cog
GUANAJUATO.- Fueron tres aeronaves no tripuladas del Ejército y de la Marina las que establecieron con precisión el lugar donde se ocultaba José Antonio Yépez Ortiz, alias El Marro, líder del cártel de Santa Rosa de Lima, quien fue detenido esta madrugada al interior de una pequeña vivienda, ubicada en una comunidad rural de Guanajuato.
Las autoridades que participaron en el operativo realizado en la madrugada informaron a MILENIO que la localización de El Marro, en el municipio Juventino Rosas, debió ser eficiente y precisa para dar con el objetivo lo más rápido posible.
Para ello, fueron utilizados drones con el propósito de desarrollar una operación quirúrgica y evitar la acostumbrada reacción de la base social y sicarios de El Marro con lo que podrían impedir su captura o ayudarlo a fugarse.
Las autoridades ya tenían conocimiento que José Antonio Yépez Ortiz había abandonado Villagrán y Cortazar, los dos principales municipios que estaban bajo su control y en los que se ocultaba, esto para refugiarse en comunidades rurales de Juventino Rosas, Apaseo El Alto y Apaseo El Grande.
Según las autoridades federales y estatales, en el operativo se detuvo a cinco personas, se detectó arsenal y se logró la liberación de una empresaria que estaba secuestrada por el grupo delictivo.
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