MONTERREY.- La pobreza en que viven es la causa de que el 55 por ciento de los mexicanos tengan una alimentación deficiente, lo cual repercute en problemas de salud.
Poco más de la mitad de las familias en México han tenido que modificar su dieta diaria, según reveló el Instituto Nacional de Salud Pública, a través de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018.
La ENSANUT, reveló que el 22.6% de la población encuestada presenta inseguridad alimentaria moderada y severa, mientras que el 32.9% restante dijo identificarse como víctimas de inseguridad alimentaria leve.
De acuerdo con la información que se trabajó en conjunto con el INEGI y la Secretaría de Salud, 7.8 millones de personas presentan inseguridad alimentaria leve en zonas urbanas, mientras que en el campo 3.17 millones de personas están en la misma condición.
La cifra de quienes padecen inseguridad alimentaria moderada o severa en las ciudades mexicanas figura en los 5.23 millones de personas, en tanto que en zonas rurales el total alcanzó los 2.25 millones.
Al respecto, el titular del Instituto Nacional de Salud Pública, señaló que dichos indicadores son cosa seria, ya que reflejan el problema de la pobreza en el país, debido a que en muchos de los casos las familias deben racionar la comida, comprometiendo la nutrición de los más pequeños, y en ocasiones dejando a algunos adultos sin la oportunidad siquiera de consumir alimento.
En contraparte, la encuesta señaló que en 2018, el 44.5% de los hogares en México dijeron contar con plena seguridad alimentaria.
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