Luego de la manifestación que realizaron choferes de las Empresas de Redes de Transporte, el gobernador del Estado de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, advirtió que no pueden convertirse en una competencia desleal para los taxistas tradicionales, por lo que las compañías tendrán que regularizarse.
“La competencia es injusta e ilegítima”, expresó al participar el décimo primer Encuentro de la Unidad Obrera Empresarial que se realizó en Expo Guadalajara.
“Nosotros no estamos en contra de las plataformas. Estamos en contra de que haya una competencia injusta, que no se tengan las mismas reglas, que no haya piso parejo. Es lo que vamos a cambiar y es lo que vamos ajustar”, resaltó Alfaro.
Insistió que las Empresas de Redes de Transporte (ERT) volverán al esquema de cobro con el que arrancaron a prestar el servicio.
Hoy en día, las empresas Uber, Cabify, City Drive e Easy, se encuentran en proceso de renovación de registro, mientras que DiDi en registro inicial.
En su discurso, advirtió que tampoco habrá espacio para el manoseo político.
Apuntó que siempre ha defendido la autonomía y libertad sindical, pero esa no debe confundirse con manipulación política.
“Eso es lo que tenemos que evitar que suceda en Jalisco, ya los primeros avisos de los riesgos que corren la nación con oportunistas y vividores que quieren hacer del tema sindical un negocio disfrazado de causa”, acusó.
Invitó a los más de 700 sindicatos que existen en la entidad para cerrar filas por la estabilidad y paz laboral. “No habrá distingos en función de simpatías partidistas, la decisión de donde se participa políticamente es un derecho que deben ejercer los trabajadores de manera libre“, prometió.
La decisión de en dónde se participa políticamente es un derecho que deben ejercer los trabajadores de manera libre, expuso Alfaro Ramírez. Mientras, el secretario general de la Federación Revolucionaria de Obreros y Campesinos del Estado de Jalisco, Antonio Álvarez Esparza, manifestó que ni la disociación ni la discordia son las formas de ganar más salarios.
“No es la polarización, ni la pulverización de la representación de los trabajadores la forma de obtener mejoras, ni la de ser más productivos”. Álvarez Esparza se pronunció porque la discusión de la reforma laboral no se politice.