Gómez Palacio, Dgo.- Cada dos de febrero, desde hace 29 años la familia Ibarra Tinoco ofrece una reliquia en honor a la Virgen de San Juan.
La tradición se remonta a hace más de 50 años cuando el padre del señor Luis Ibarra se encontró una virgen de bronce en un bote de basura, desde ese momento, la Virgen De San Juan se convirtió en un motor para ellos.
Siguiendo la tradición de sus padres Benita y Agustín, Don Luis prepara una gran fiesta en honor a esta virgen, en donde cocinan más de 30 kilos de cerdo en asado, 15 cajas de sopa y 15 de arroz, además de contratar conjunto norteño, una danza para agradecer solo un poco de los favores que día a día les concede.
Uno de los favores más recientes que está virgen les ha concedido a la familia es el de sanar la pierna de Don Luis, extremidad que le quedó dañada luego de un accidente en el 2003 y que en el 2019 estuvo a punto de ser amputada.
En altar se dejan ver las fotos de los padres de Don Luis, quienes se rodean de figuras de la Virgen de San Juan, que aguardan el dos de febrero para ser festejadas.