JALISCO.- Esta es la sala de videollamadas para que personas privadas de su libertad puedan tener contacto con sus familiares durante la contingencia por Covid-19.
Se instaló a las afueras de los juzgados del anterior sistema de justicia penal en el Complejo de Puente Grande, Jalisco. Ahí, mujeres -en su gran mayoría- esperan que las llamen y puedan dialogar SOLO cinco minutos con su familiar.
“No nos podemos quitar el cubrebocas y ya enlaza la llamada, ya pasé y él se ve clarito. Sí se ve bien, y a ellos también les da mucho gusto, porque tampoco sabían y esa emoción de aunque sea vernos ahí cinco minutos, pero ya vimos que está bien”, comentó Gisley Muñoz, familiar de interno.
El hermano de Gisley se encuentra internado en el Reclusorio Preventivo de Guadalajara. Era chofer de la plataforma de Uber.
“Pues se ve medio deprimido, porque no nos ha visto, pero ahorita le cambió mucho su rostro”, agrego Gisley. Gisley se enteró de la existencia de las videollamadas, luego de llevarle alimentos a su hermano.
¿Pero qué le pidió él?
“Nada más nos pide que traigamos cosas como cloro, gel antibacterial y todo lo que ellos ocupan”, mencionó.
Además de las videollamadas, autoridades penitenciarias habilitaron el número 33.3030.0447 para dar información sobre el estado de salud o estatus jurídico de cada uno de los reos.
cog
JALISCO.- Esta es la sala de videollamadas para que personas privadas de su libertad puedan tener contacto con sus familiares durante la contingencia por Covid-19.
Se instaló a las afueras de los juzgados del anterior sistema de justicia penal en el Complejo de Puente Grande, Jalisco. Ahí, mujeres -en su gran mayoría- esperan que las llamen y puedan dialogar SOLO cinco minutos con su familiar.
“No nos podemos quitar el cubrebocas y ya enlaza la llamada, ya pasé y él se ve clarito. Sí se ve bien, y a ellos también les da mucho gusto, porque tampoco sabían y esa emoción de aunque sea vernos ahí cinco minutos, pero ya vimos que está bien”, comentó Gisley Muñoz, familiar de interno.
El hermano de Gisley se encuentra internado en el Reclusorio Preventivo de Guadalajara. Era chofer de la plataforma de Uber.
“Pues se ve medio deprimido, porque no nos ha visto, pero ahorita le cambió mucho su rostro”, agrego Gisley. Gisley se enteró de la existencia de las videollamadas, luego de llevarle alimentos a su hermano.
¿Pero qué le pidió él?
“Nada más nos pide que traigamos cosas como cloro, gel antibacterial y todo lo que ellos ocupan”, mencionó.
Además de las videollamadas, autoridades penitenciarias habilitaron el número 33.3030.0447 para dar información sobre el estado de salud o estatus jurídico de cada uno de los reos.
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