Coahuila.- La producción de carbón es una de las actividades económicas que ha permitido a las familias de comunidades rurales como Venustiano Carranza enfrentar los estragos económicos que ha traído consigo la pandemia del coronavirus.
Desde temprana hora inician la jornada recorriendo para el corte de leña de mezquite que deberá ser tratada durante cinco días para convertirla en carbón.
Jesús Nájera desde hace 18 años se dedica a esta actividad que ha pasado de generación en generación como una actividad económica alterna a la siembra de melón y sandía.
Pese a un proceso tardado para la elaboración de carbón, la mayor ganancia se la llevan los 'coyotes' o intermediarios en la venta pues les compran en cuatro pesos el kilo.
La producción por familia es de alrededor de 600 kilos por semana, lo que les permite obtener los recursos para el sustento familiar.